Industria decide no intervenir en la política de dividendos de las eléctricas

El nuevo equipo energético del Ministerio de Industria y Energía ha decidido no intervenir directamente en la política de distribución de dividendos que seguirán este año las empresas eléctricas, en contra de lo que se hizo el ejercicio pasado. Los responsables ministeriales prefieren que sean las propias empresas las que realicen un ejercicio de moderación, y estiman, en esta línea, que sería aconsejable que las cantidades distribuidas no superen las obtenidas por ampliación de capital. Industria consulta estos días a las bolsas españolas diversos escenarios para una recuperación bursátil de estos valores.

Los presidentes de las ocho principales empresas eléctricas, que continúan reuniéndose todos los miércoles en la sede de Unidad Eléctrica (Unesa) para estudiar las "cuestiones pendientes" del proceso de saneamiento del sector, han comenzado esta semana a desfilar, uno a uno, por el despacho del secretario general de la Energía, Fernando Maravall. El objetivo de estas reuniones es escuchar las opiniones de cada presidente sobre la situación de cada empresa, y por mutuo acuerdo de los responsables eléctricos, se informa en el curso de ellas al ministerio de la política que van a seguir en la distribución de dividendos con cargo al presente ejercicio.El ministerio, según fuentes solventes, ha sido receptivo a las opiniones de los empresarios eléctricos y ha matizado que no tiene ningún deseo de intervenir en las decisiones que corresponden decidir, legal y gerencialmente, a las empresas. No obstante, ha sugerido que la situación del sector eléctrico, en fase de recuperación pero con ciertos problemas en determinadas empresas, no aconseja grandes derroches y que sería deseable mantener un equilibrio entre el dinero que sale para primar al accionista con el que entra por ampliación de capital. Asimismo, insiste en la necesidad de vigilar el nivel de endeudamiento neto o, mejor dicho, la conveniencia de no diferir costes indefinidamente.

Consultas con la bolsa

La preocupación de los responsables del Ministerio de Industria se centra en el impacto que podría tener en la bolsa una recomendación generalizada, incluso selectiva, de recorte de los dividendos. Industria es consciente que la financiación de las sociedades por vía del mercado de valores es uno de los pilares en la necesaria reducción de costes del sector, sobre todo en un ejercicio, como el próximo, donde los aumentos de tarifas se van a ver sometidos o condicionados pro la necesidad de una política antiinflacionista que modere los costes de energía de las empresas y que les devuelva la competitividad ante la CE.A este efecto, Industria se encuentra estudiando con los distintos mercados de valores españoles varios escenarios para devolver protagonismo al sector eléctrico dentro de la bolsa y dotar de una competitividad bursátil a unas empresas que apenas se han beneficiado del boom del último año.

En ambos lados de las consultas están convencidos de que muchos de los problemas bursátiles del sector eléctrico responden a la pasada insistencia por parte oficial en supervisar estas empresas y vigilar su proceso de saneamiento. Para Industria, deben ser las empresas que se encuentran en peor situación las que inicien "gestos o medidas" que indiquen que sus accionistas y acreedores van a responder por ellas.

Como consecuencia de las conversaciones con el ministerio, cuatro sociedades han anunciado, o están a punto de anunciar, dividendos a cuenta. Se trata de Unión-Fenosa, que repartirá el 2,75% neto; Sevillana e Hidrola, que entregarán el 4% neto, e Iberduero, que anunciará probablemente el 5%. FECSA, por su lado, ha dejado ver que intenta mejorar el dividendo de 1985.

Con todo, fuentes solventes aseguran que el anuncio del dividendo a cuenta no presupone la política definitiva en cuanto a distribución de dividendos de las diferentes empresas. Este extremo será sometido a negociaciones en 1987.