La oposición, molesta por el rechazo de sus enmiendas

Los presupuestos generales del Estado para 1987 serán aprobados mañana en su fase de sesión plenaria en el Congreso de los Diputados con el disgusto de la oposición al considerar que el PSOE se ha cerrado radicalmente a la posibilidad de aceptar sus enmiendas. Los socialistas anunciaron desde el comienzo de este proceso legislativo, cuando los Presupuestos estaban en ponencia, que no aceptarían las enmiendas que supusieran aumento del gasto público o disminución del ingreso. A pesar de este aviso los portavoces no han dejado de denunciar esta situación durante los debates.Los diferentes grupos de oposición coincidieron la pasada semana en pedir un aumento en los salarios de los funcionarios, incremento de las pensiones y aumentar el mínimo de cotización en 700.000 pesetas y no en 500.000 como auspicia el Gobierno. La intención del Grupo Socialista es la de acabar la discusión por la mañana, objetivo que solo podrá ser cumplido si se imprime gran celeridad a los debates. Todavía no se han discutido los presupuestos de ocho ministerios y de todos los organismos públicos, incluida RTVE.

Los parlamentarios continuarán esta tarde la discusión y está prevista una sesión nocturna, segunda desde que comenzó el debate presupuestario.