Satisfacción en UGT y patronal, mientras CCOO pide revisión salarial para 1987

La subida del 0,4% del índice de precios al consumo (IPC) en el pasado mes de octubre provocó reacciones contrapuestas entre los principales sindicatos, ya que mientras UGT señalaba que "a pesar de ser malo, como hay tanto agorero de la inflación, se acaba convirtiendo el fracaso en éxito", CC 00 declaraba ayer que "tras conocer el IPC de octubre insta al Gobierno a que reconozca el fracaso de su política económica". En medios de la organización patronal CEOE se señalaba que "es una buena noticia para la generación de expectativas futuras, la revisión salarial pactada y la concertación de 1987 aunque el problema siga siendo grave por el tremendo diferencial de inflación con los países de la CE".Apolinar Rodríguez, de UGT, declaró ayer que desde hace unas semanas se había desatado una serie de declaraciones de altos cargos de la Administración y del Banco de España que traslucían que, tras el fuerte incremento del índice de precios de septiembre, "era poco menos que imposible finalizar el año no ya con el 8% previsto sino ni siquiera con el 9% al que se presentaba últimamente como más posible".

Y sin embargo, declaraba el dirigente de UGT, "la cifra de octubre y la posibilidad de que la de noviembre sea bastante menor, como consecuencia de la baja de los derivados del petróleo, permite esperar que no haya una desviación demasiado fuerte del objetivo previsto por el Gobierno". Para UGT es preciso que, el Gobierno haga todo lo posible para lograr alcanzar sus objetivos previstos de inflación para impedir problemas en la concertación.

Los próximos meses

CC 00, por su parte, difundió ayer un comunicado en el que instaba al "Gobierno a reconocer el fracaso de su política económica y aceptara que, tras las declaraciones del director general del Banco de España, Raimundo Ortega, la inflación en 1986 será superior al 9%" a pesar de la rebaja petrolífera. En esta línea, CC 00 señaló que "el desbordamiento de las previsiones para 1986 echan por tierra el objetivo del 5% para el próximo año que ahora ya resulta inviable".

En la patronal CEOE existía una sensación de respiro ayer tras conocerse el 0,4% de incremento de los precios en octubre, aunque se señalaba que el problema del diferencial de inflación con los países de la CE seguía siendo muy grave.

No obstante, se añadía, "es bastante probable que el año se cierre con algo menos del 9% de inflación, lo que permite mantener el objetivo para 1987 en el 5%, con lo que ello tiene de sIgnificativo a la hora de establecer los incrementos de costes internos de los productos nacionales". Hacer otra cosa, señalaban, es alimentar nuevas expectativas inflacionistas que repercutirán de forma negativa.