'Le Figaro' reaviva un escándalo económico que compromete a dirigentes socialistas franceses

El escándalo económico de la sociedad Carrefour Devéloppement, reavivado ahora por el diario Le Figaro, sigue extendiéndose como mancha de aceite. Hasta ahora son 12 las personas inculpadas, todas ellas vinculadas a Yves Chalier, actualmente en fuga y jefe de gabinete del ex ministro de la Cooperación Christian Niacci.

Las últimas ramificaciones del caso parecen implicar cada vez más al propio ex ministro socialista, que habría utilizado parte del dinero desaparecido (unos 13 millones de francos, equivalentes a 260 millones de pesetas) para financiar su campaña electoral en el departamento de Isère y, para pagar las cuotas como militante de su partido.El semanario dominical de Le Figaro, el periódico conservador de Robert Hersant, va más lejos en un reportaje publicado este fin de semana en el que intenta implicar en este asunto a un peso pesado del socialismo, Roland Dumas, ex ministro de Asuntos Exteriores, amigo del presidente François Mitterrand y nuevo presidente de la comisión de Asuntos Exteriores de la Asamblea Nacional.

Las acusaciones lanzadas por Figaro Magazine son totalmente nuevas en el caso Chalier. Según el periódico conservador, la empresa pública Compañía Francesa para el Comercio Exterior (Coface) autorizó y proporcionó garantías al banco Crédit Lyonnais para financiar las obras de reparación y ampliación del aeropuerto de la isla de Antigua (Estado independiente de las Antillas) por un valor de 11 millones de dólares (unos 1.440 millones de pesetas). Las obras fueron contratadas por la sociedad francesa Building Finishing System, hoy en suspensión de pagos, que según Figaro Magazine tiene participación en la Agencia Borgoñona de Comunicación agencia de noticias "conocida por sus posiciones próximas al Partido Socialista", según el periódico.

Las anormalidades que apunta la revista son las siguientes: ha habido sobrevaloración del coste de las obras estimado por el Banco Mundial en 7,5 millones de dólares; el organismo público Coface ha cubierto una operación de alto riesgo en un país endeudado, y ha habido un tráfico de influencias que permite sugerir alguna nueva desviación de fondos y algún tipo de corrupción. En la red de contactos entre el Gobierno familiar de Antigua y Francia, Figaro Magazine ofrece abundantes documentos que acreditan, entre otros detalles el intento de las autoridades de la isla de entrevistarse con el ex ministro Dumas después de que Coface, a instancias del propio Ministerio de Exteriores, hubiera denegado el crédito. El reportaje asegura con contundencia la vinculación de Yves Challer a la red de influencias y asegura que el ex ministro Nucci, no Roland Dumas, llegó a recibir al ministro de Transportes de Antigua. Roland Dumas, por su parte, ha declarado que desconocía este asunto.

El reportaje aparece pocos días después de la elección de Dumas como presidente de la comisión de Exteriores de la Asamblea Nacional, gracias a la desunión de los diputados de la mayoría gobernante Asamblea para la República-Unión para la Democracia Francesa (RPR-UDF). La elección de Dumas ha sido interpretada por algunos comentaristas como un golpe al Gobierno de Jacques Chirac, pues permite a un socialista acceder a abundante documentación diplomática. Las relaciones de Dumas con Mitterrand ofrecerían a este último facilidades para recuperar el control de las relaciones exteriores.