Congreso del Partido Comunista Chino para rejuvenecer la dirección

El pleno del Comité Central del Partido Comunista Chino adoptó ayer un documento en el que se reafirma la necesidad de proceder a reformas económicas que deben introducirse simultáneamente a un reforzamiento de la educación ideológica. Los 325 titulares y suplentes del Comité Central del Partido Comunista Chino decidieron, además, que se celebre un congreso en octubre de 1987 para proceder a un rejuvenecimiento del aparato dirigente.La resolución, cuyo texto fue publicado ayer por la agencia oficial de noticias Nueva China, reafirma la necesidad de proseguir la apertura del país hacia el exterior y de adaptar el marxismo a las condiciones de la China actual.

Presidida por los cinco miembros del comité permanente del partido, entre ellos el número uno Deng Xiaoping, que ha cumplido recientemente 82 años, el pleno decidió que China "continuará reformando sus estructuras políticas y económicas acelerando los progresos culturales e ideológicos del país". La resolución formula un llamamiento para que se proceda poner en práctica una "domocracia socialista", que debería tener su manifestación en el marco de la dirección del partido.

Los observadores señalan que la resolución reitera las tesis defendidas por los reformistas desde el regreso al poder de Deng Xiaoping en 1978. El documento presenta como "tarea fundamental" la "elevación de los criterios ideológicos y éticos de toda la nación" con el fin de llegar a una "modernización socialista". El documento señala que es "erróneo considerar el marxismo como un dogma rígido". "La edificación de una sociedad socialista", prosigue el documento, "con una cultura y una ideología avanzadas debe ser capaz de promover la modernización de China y la reformas, así como la apertura al mundo exterior".

La resolución constituye un compromiso entre los reformistas y los conservadores en el seno del régimen chino, según fuentes diplomáticas occidentales en Pekín, así como la consagración de los jóvenes en el aparato. La insistencia en los aspectos ideológicos trata de satisfacer a la fracción conservadora del régimen, que es hostil a la ampliación de las reformas actuales.