Ocho presos se fugan de El Dueso aprovechando sus vacaciones

Ocho de los 170 internos que cumplen condena en el centro penitenciario de El Dueso, en Santoña (Santander), no regresaron tras haber obtenido permiso de una semana a lo largo de julio y agosto.

De los presuntamente evadidos, cinco tienen nacionalidad extranjera y, según el director de El Dueso, se duda de que puedan ya ser detenidos, porque tras el quebrantamiento de condena, los reclusos, han dispuesto de tiempo suficiente para pasar, de un modo u otro, la frontera y tratar de retornar a su país de origen. El Dueso tiene, actualmente, una población penal compuesta por 449 internos, de los cuales quie nes han cumplido la cuarta parte de la condena y han observado buena conducta durante su estancia en el establecimiento penal pueden acogerse a una licencia de salida o vacaciones por muy diversos motivos de carácter personal o familiar.

Confirmación oficial

El Diario Montañés publicó ayer un reportaje en el que se informaba sobre la situación de los ocho reclusos. Todos estos extremos fueron confirmados ayer por la dirección de El Dueso.Se recuerda ahora que uno de los beneficiados por permiso de salida, Tomás Ruiz Fernández, alias Tomasín, que salió a la calle por un plazo de ocho días, con motivo de la última Navidad, aprovechó los días de libertad para ser, presuntamente, autor o coautor de la muerte de cinco personas en la región, hasta ser detenido en un bar de Laredo, a principios de abril.

Tomasín tuvo en vilo, hasta su localización, a la sociedad y las fuerzas del orden de Cantabria, por la audacia de sus presuntos crímenes.

Ahora se encuentra, otra vez, en la cárcel provincial.

Otros dos internos con permiso de vacaciones, Manuel Martiño Bravo y José Luis López González, con un denso historial delictivo, fueron en julio último presuntos autores de dos homicidios.

Ambos sucesos ocurrieron el mismo día y en el espacio de pocas horas, en La Felguera (Asturias) y en el pueblo cántabro de Rumoroso, donde dieron muerte presuntamente al taxista que les había traído de aquella localidad tras la comisión del primero de los dos homicidios.