El fallo en Ascó 2 se repitió una vez subsanado, según los inspectores

La gravedad de las anomalías descubiertas en uno de los sistemas de seguridad de la central nuclear Ascó 2 radica en el hecho de que se ha repetido el mismo fallo, después de haberse considerado subsanado la primera vez que se produjo, según han manifestado a EL PAÍS los tres inspectores enviados por el Consejo de Seguridad Nuclear. La reiteración del fallo es especialmente relevante por afectar a un mecanismo de seguridad que debería actuar precisamente en caso de accidente. Por esta razón, los inspectores han indicado que su investigación se prolongará más de lo inicialmente previsto, y abarca tanto a los aspectos fisico-técnicos de las instalaciones como a la efectividad de los servicios humanos que controlan la central.El equipo de inspectores del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) que investiga las causas de los fallos en los sistemas de seguridad de la central está formado por José Ignacio Villadóniga, jefe del área de Centrales de Agua; Miguel Barrado, jefe de control del proyecto de Ascó, y Javier Zarzuela, inspector permanente destinado por el Consejo a esta central.

José Ignacio Villadóniga precisó que el CSN no ha actuado en este caso a remolque del requerimiento formulado por el gobernador civil de Tarragona, Vicente Valero, quien exigió información sobre las averías, puesto que tanto el gobernador como el Consejo fueron informados puntualmente y con detalle del alcance de las anomalías. "El disparo del reactor", dijo, "se produjo sobre las seis de la madrugada del sábado 23, por una avería menor en las válvulas de aislamiento de agua de alimentación. A las 7.15 horas se descubrió el fallo de una válvula de aislamiento de vapor. El Consejo consideró que esta anomalía era de la suficiente importancia como para parar la central, y así lo ordenó a las 8.15 horas".

Sobre el alcance de las averías, José Ignacio Villadóniga declaró: "Se han producido dos problemas de alcance diferente. La avería en las válvulas de aislamiento de agua de alimentación que provocó precisamente el disparo del reactor o parada de seguridad no es grave ni comporta peligro alguno. Pero otra cosa es que tanto el 1 de julio como el 23 de agosto, después del disparo del reactor y en operaciones de control para la puesta en marcha de la central, se comprobó que no cerraban dos de las válvulas de aislamiento del vapor en la primera ocasión y una en la segunda. Este fallo, si no ha habido un accidente, como es el caso que nos ocupa, no tiene afortunadamente ninguna repercusión, pero las consecuencias habrían podido ser graves en caso de accidente".

Algún vicio oculto

Según el protocolo que rige el funcionamiento de la central, ésta no puede funcionar si no son operables las válvulas ahora averiadas, y, en caso de que no funcionen, hasta que no se haya corregido el problema y determinado sus causas. Aquí radica precisamente la dificultad de la investigación de los inspectores, puesto que, aunque se conocen perfectamente el mecanismo y la descripción de la avería, no se sabe todavía por qué se ha producido y, mucho menos, por qué ha afectado a una misma válvula en dos ocasiones seguidas. Algún vicio oculto altera este sistema de seguridad. "El problema no es que haya fallado el sistema de seguridad. Nosotros trabajamos sobre la hipótesis de que un fallo de este tipo es posible, y por eso se realizan las revisiones periódicas. El problema es que el fallo se repita dos veces y en un lapso de tiempo tan breve", indicaron los inspectores.

Según estos técnicos, ésta es la avería más grave ocurrida en la central Ascó 2, que ya tuvo otra importante en marzo de 1985.

Por otra parte, el portavoz del Centro Democrático y Social (CDS) en el Congreso de los Diputados, Agustín Rodríguez Sahagún, ha solicitado al Gobierno en varias iniciativas parlamentarias que explique las medidas de seguridad tomadas ante las averías detectadas en algunas centrales nucleares, y en particular en la de Ascó. Asimismo, pide al Gobierno información detallada y urgente sobre las garantías de seguridad en el uso pacífico de la energía nuclear en España.