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ATLETISMO

Scott ganó el 1.500 de Zurich y Abascal superó a González

Steve Scott ganó la carrera de los 1.500 metros de la reunión de Zúrich (Suiza), en la que José Luis González y José Manuel Abascal se enfrentaban, por primera vez en su vida, en igualdad de forma. A ambos se les adelantó también Sebastian Coe, que les sorprendió, a su vez, en la trepidante lucha mantenida en los últimos 200 metros. La batalla fue a muerte y acabó con González por los sucios. Éste no pudo dar más de sí en los metros finales y rodó por la pista. No era posible ya mayor entrega. El marroquí Said Auita, por su parte, se quedó a 44 centésimas del récord mundial de 3.000 metros.

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Lo vivido ayer por Abascal y González no tuvo precedentes en sus enfrentamientos. Jamás se habían visto en una pista tan igualados de fuerzas., pero lo que no se podía imaginar era que la lucha llegaría hasta el extremo de que uno de los dos no pudiera acabar la carrera. Estaba, por una parte, su duelo particular; por otro, el querer ganar ante rivales de la categoría del británico Coe, campeón olímpico, y del estadounidense Scott, que está entre los diez mejores de todos los tiempos.La carrera era complicada porque no iba a ser una contra reloj en busca del récord del mundo. Coe iba a exigir a las liebres el ritmo que más le conviniera para llegar en el mejor estado al final y tratar de imponer su velocidad. Atacar antes de tiempo resultaría temerario y aguardar el sprint llevaría necesariamente a la derrota.

La primera liebre, el estadounidense Mays, marcó un ritmo falso, 56.10 segundosa los 800 metros, que eran paso de récord mundial. La siguiente, el keniata Chesire, hizo más lenta la carrera: la llevó hasta los 1.200 metros en 1.56.06 minutos. Ahí empezaba la batalla. Saltó Abascal. Tras él, González; y poco después, Coe y Scott, que contemplaron durante 150 metros cómo la pareja española se iba a dejar la vida, en el duelo. No tuvieron prisa, por tanto, en subir a la cabeza y esperaron a la curva para ganar la prueba.

González y Abascal ya no vieron cómo les pasaban Coe y Scott. Los españoles llegaron a la última recta codo con codo Primero era Abascal, luego González. Ya no parecían corredores. El orgullo les mantenía en pie. El cambio de ritmo que buscaba González no era posible porque Abascal había impuesto una elevadísima velocidad de crucero. Lo intentó, sin embargo y por unos metros se puso delante. Coe ya les había rebasado y poco después lo hacía también Scott, que sorprendió a todos en su llegada. Abascal se mantuvo en su ritmo, González, en cambio, pagó el sobreesfuerzo que se exigió. La carrera se acababa. La meta esta ahí. Pero no llegaba nunca para dos atletas que habían sobrepasado el límite. González, antes que ceder, moriría. Cuando volvió a solicitar a sus piernas el máximo de revoluciones rodó por el suelo. Abascal fue el primero en atenderle apenas cruzó la meta. González también había sido el primero en desearle suerte antes de la salida.

En la carrera estelar, los 3.000 metros, Said Auita salió a por el récord del mundo. Se quedó a menos de un segundo, 7.32.1 minutos, que tiene el keniata Henry Rono desde 1978. Cuando el año pasado intentó Auita rebajar esta marca en Bruselas, se quedó a menos de un segundo (7.32.94) y similar diferencia es la que separó esta vez de nuevo a Auita del récord mundial de la milla hace ahora un año en Zúrich y del de 5.000 hace unos días en La Coruña.

Auita pasó 2.000 metros en siete segundos menos (2.27.34) que cuando lo estableció Rono, y en los 2.000 mantenía aún una diferencia a su favor de dos segundos (5.02.41). Auita pidió liebres rápidas y las tuvo, el canadiense Nelson y el holandes Kulker. Y también un rival de categoría, Maree, hasta la última vuelta. El récord parecía hecho. Auita entró en la recta final pletórico; parecía sonreír antes de cruzar la línea de meta, sin separar los ojos del cronómetro, pero inmediatamente se llevó las manos a la cabeza.

En 110 metros vallas, Javier Moracho se resintió de su lesión, Colomán Trabado ganó la serie C de 800 metros con 1.46.09 minutos, Sánchez Vargas fue quinto en los 3.000 metros obstáculos (ganó el belga Van Dijck en 8.17.24.), y José Alonso Valero quedó cuarto en 400 vallas, con 49.63 (ganó el estadounidense Page con 49.28).

Carl Lewis reapareció y el público le mostró su antipatía. El cuádruple campeón olímpico acabó tercero en los 100 metros con un tiempo de 10.25 segundos. Le superaron el nigeriano Imoh y el canadiense Ben Johnson, vencedor con 10.03.

TVE emitió en diferido un amplio resumen de la reunión, tal como figuraba en su programación oficial, a partir de las 23.45, cuando un portavoz había informado 24 horas antes a un redactor de éste periódico que "dada la importancia de la competición" finalmente iba a ofrecerse en directo, por la segunda cadena, desde las 20.00 horas. Igualmente, en el telediario de las 21.00 del pasado martes, Frederic Porta anunció en la sección de Deportes la transmisión en directo, desde las ocho de la tarde, por la segunda cadena, de la reunión atlética.

Numerosas llamadas

Numerosas personas llamaron ayer a esta redacción expresando su indignación tanto por el anunció televisivo incumplido como por no haberse ofrecido la competición en directo. Por su parte, una de las telefonistas que respondía a quienes llamaban a TVE explicaba: "En esta casa se funciona de tal forma que los señores de deportes anuncian por su cuenta una transmisión sin pedir confirmación a los de emisión. Eso es lo que me han explicado". Anoche, en la segunda edición de telediario no se hizo mención alguna del asunto.

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