Los atletas de élite hacen fracasar el gran premio de la IAFF
La Federación Internacional de Atletísmo Aficionado (IAFF) creó el año pasado el gran premio. Se trataba de establecer una puntuación a lo largo de las reuniones, de verano para dar a conocer los mejores atletas del año, algo así como el gran premio de tenis o los de Fórmula 1. Esta temporada se celebra la segunda edición, y los mejores atletas del mundo siguen demostrando escaso interés por estar en los primeros puestos de la clasificación. Said Auita, Steve Cram o Carl Lewis pairticipan solamente en las reuniones que les interesan. Ellos, como otros muchos, están por encima de la IAFF, que ha intentado conquistar un protagonismo que no le pertenece.El gran premio se inició el pasado 31 de mayo en San José (Californía, EEUU), y ya pasó por Bratislava (Checoslovaquia), Estocolmo, Dresde (Alemania Oriental), Oslo, Helsinki, Moscú, Londres, Niza (Francia) nuevamente Londres y Budapest. Ayer recaló en Zúrich (Suiza) y seguirá por Berlín (mañana), Colonia (Alemania Occidental, 17 de agosto), Bruselas (5 de septiembre) y Roma (10 de septiembre). En cada reunión se conceden nueve puntos al ganador, siete al segundo, seis al tercero, cinco al cuarto, cuatro al quinto, tres al sexto, dos al séptimo y uno al octavo. Un récord mundial se prima con seis puntos más, y en caso de igualarlo, con tres.
Las pruebas que esta temporada puntúan son las masculinas de 100 metros (con Williams de líder de la clasficación), 800 (Gray), milla (Scott), 5.000 (Rousseau), 3.000 obstáculos (Marsh), 400 vallas (Harris), altura (Howard), triple salto (Conley), peso (Backes) y martillo (Sedyhk), y las femeninas de 200 (Ashford), 400 (Dixon), 1.500 (Puica), 5.000 (Kristiansen), y en vallas (Oschkenat), disco (Khristove) y jabalina (Whitbread). La mayoría de estos atletas ha demostrado su inferioridad ante quienes no participan.
En la puntuación global es el estadounidense Danny Harris el que aparece como campeón de campeones, aunque en su prueba, los 400 metros vallas, su compatriota Edwin Moses, que no pierde una carrera desde hace casi 10 años, donde ha acumulado 115 victorias consecutivas.
La IAFF creó unas compensaciones para la participación final del gran premio: desde 1.350.0013 pesetas para el primer clasificado de cada prueba hasta 135.00,0 al octavo. Y para el que consillguiera más puntos, independientemente de su especialidad,, 3.375.000 pesetas. Pero la IAFF invierte en el gran premio poco más de 100 millones de pesetas, cantidad inferior a la que ayer puso en juego Zúrich.
