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Varios incendios intencionados arrasan cientos de hectáreas de monte bajo y pastos en el norte de la región

Un incendio intencionado quemó en la tarde de ayer una superficie de varios cientos de hectáreas de monte bajo, matorral y pastos en varios pueblos del norte de la región (Colmenar Viejo, Soto del Real, Miraflores de la Sierra, Guadalix de la Sierra y Bustarviejo). A las cinco de la tarde se observaron más de 10 focos, todos ellos al margen izquierdo del ferrocarril Madrid-Burgos, en dirección hacia Madrid. Dos horas después, los frentes de fuego cubrían un arco de aproximadamente, 30 kilómetros. Las primeras investigaciones apuntan a que el presunto incendiario viajaba en el ferrocarril.

El primer foco se inició en Miraflores de la Sierra. Varios testigos señalaron que el fuego "se propagó como una mecha" en varios tramos del margen izquierdo de la vía ferroviaria en dirección a Madrid. El último foco, observado en Tres Cantos (Colmenar Viejo), distaba del primero unos 30 kilómetros. En poco más de media hora, toda la zona quedaba cubierta por una densa cortina de humo.Según testigos pesenciales, el incendio declarado a menos de dos kilómetros del casco urbano de Miraflores de la Sierra "empezó a partir de un fogonazo, provocado seguramente por una sustancia combustible, que despedía unas llamas que no parecían naturales". Este foco, que llegó hasta las lomas de montes cercanos después de quemar robles y encinas, se propagó hacia el norte y llegó hasta el paraje conocido como Las Viñas de Bustarviejo.

Viviendas amenazadas

En el término municipal de Soto del Real, un tercer fuego amenazó a varias colonias residenciales situadas cerca de la vía férrea. El cambio del viento -que comenzó soplando en dirección sur y cambió en dirección noreste- desplazó el fuego a un lugar alejado de las viviendas, por lo que no fue necesaria la evacuación de ninguna zona.Otro foco de gran intensidad se inició cerca del cerro de San Pedro, en el término municipal de Colmenar Viejo. Pedro de Manuel, sargento de la Policía Municipal de esta localidad, coordinaba allí las tareas de extinción. "El viento racheado y el número de focos han sido las principales dificultades", afirmaba De Manuel. "Los coches de bomberos han tenido que detenerse una y otra vez a lo largo del camino para sofocar otros fuegos".

Los efectivos de 13 coches de bomberos intervinieron ayer en las tareas de extinción, en las que colaboraron también un hidroavión del Icona y otro de las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra (FAMET). Más de un centenar de soldados del Ejército de Tierra y otros tantos voluntarios, armados de ramas y mantas, se movilizaron para hacer frente al fuego.

Otro pequeño foco se declaró en unos pastos junto al Centro de Instrucción de Reclutas número 1 de Colmenar Viejo. El más próximo al término municipal de Madrid se declaró entre la vía del ferrocarril y la carretera C-607, a la altura del kilómetro 25, en Tres Cantos.

A primera hora de la madrugada de hoy los incendios estaban prácticamente sofocados. Detrás quedaban una vasta extensión de pastizales chamuscados y algunos animales muertos.

Varias fuentes oficiales consultadas sostienen la hipótesis de que el origen del fuego estuvo en algún pasajero que viajaba en tren en dirección hacia Madrid. Las mismas fuentes admitieron como posible el empleo de algún tipo de material combustible que propiciara la extensión de las llamas. En la estación de Chamartín no fue posible obtener información anoche sobre los trenes que transitaban la vía férrea Madrid-Burgos en el momento de producirse los incendios.

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