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Reportaje:VERANO 86

El calor altera a los monos de Gibraltar

Las altas temperaturas veraniegas están causando estragos en una de las atracciones turísticas más firmes de Gibraltar: los monos. Se trata de una locura pasajera, de amor, pero no por ello menos molesta. De ahí que haya motivado hasta un comunicado oficial del Cuartel General británico en la Roca, responsable desde 1915 del control de esta especie, alertando a los ciudadanos sobre los riesgos que entraña este comportamiento veraniego de los simios. El comunicado de Fortress Headquarters especifica que son las monas con su agresividad maternal las que alteran la paz de la especie.

Algunos machos terminan desterrados y descienden desde las alturas del Peñón a zonas habitadas por humanos. Durante un reciente fin de semana, dos monos fueron sorprendidos almorzando en la cocina del cuartel de infantería ubicado en la zona sur de la Roca.Era inevitable la preocupación militar. Cualquier persona que vea un mono alejado de su entorno habitual debe contactar inmediatamente con las autoridades militares, decía el comunicado.

Y es que los monos de Gibraltar son responsabilidad directa de los militares desde el año 1915, cuando recién estallada la I Guerra Mundial se nombró a un oficial del cuerpo de artillería officer in charge of rock apes (oficial encargado de los monos). En esos tiempos, unos 200 monos habitaban en la Roca y grupos de ellos invadían constantemente la ciudad e incluso las instalaciones militares.

Claro está que el amor británico hacia los animales luchaba contra el uso de las armas para exterminar a estos macaca sylvana, como se denominan en términos científicos. Fue entonces cuando se tomó la decisión de alimentar a los monos diariamente en un lugar específico llamado Queen's Gate (Puerta de la Reina), aproximadamente a la mitad de la altura del Peñón. La constancia británica consiguió que los monos empezasen a concentrarse en aquel lugar, ya que incluso se habían contratado unos burros para transportarles agua todas las mañanas. Y ésta sigue siendo la situación hasta hoy: los monos se han convertido en una atracción única para los turistas que visitan Gibraltar, ya que son los únicos especímenes en Europa que no están enjaulados.

No más de 50 monos

Actualmente el número de monos se mantiene entre los 30 y 50. Cuando existe un exceso se exportan a parques zoológicos en todas partes del mundo. Se recuerda un incidente ocurrido en los años cincuenta, cuando un parque zoológico en Jerez hizo un pedido de uno de estos importantes monos. La reina Isabel II de Inglaterra había visitado Gibraltar unos, años antes, en 1954, y esto causó malestar político en el régimen del general Franco. Según archivos militares consultados, existía preocupación en Gibraltar por temor a que algún periódico español, con ánimo de exacerbar las cosas, pudiera crear un incidente diplomático, ya que los monos son "propiedad de la corona británica", como se le comunicó en su día al vicecónsul británico en Jerez.El vicecónsul declaró que no preveía dificultades en importar el mono, en una jaula especialmente fabricada, por el paso de La Línea de la Concepción. Se le otorgó esta misión a una empresa de la Roca que habitualmente enviaba sus camiones a Jerez para transportar el vino español a la colonia británica.

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A las nueve de la mañana del día 17 de enero de 1957, el mono llamado Juan, fecha de nacimiento 6 de julio de 1952, fue consignado al vicecónsul británico en Jerez para que él, a su vez, lo presentase al parque zoológico.

Durante la I Guerra Mundial, la leyenda de que cuando se marcharan los monos se marcharían los ingleses de Gibraltar influyó para que Winston Churchill, entonces primer ministro británico, enviara un mensaje a las autoridades militares de Gibraltar expresando preocupación porque solamente quedaban siete monos. Ordenó que el número de monos nunca fuera menor de 24 y que consiguieran ejemplares como fuera. Acto seguido, los consulados británicos en Tánger y Tetuán recibieron órdenes, algo extrañas dentro de los quehaceres diplomáticos, de ir a la caza de monos, ya que es la única zona donde existe la misma especie.

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