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El juez Forteza otorga libertad sin fianza a los dos comisarios detenidos

Vicente Perales Sanchis Antonio López Santisteban, los dos comisarios valencianos detenidos el miércoles por orden del juez Guillermo Forteza, quedaron en libertad sin fianza a última hora de la mañana de ayer, cuando estaba a punto de cumplirse el plazo máximo de 72 horas que establece la ley para las detenciones. Tal y como se esperaba, el juez no dictó auto de prisión para los funcionarios, ya que el presunto delito de prevaricación por el que les incoó diligencias previas se castiga con pena de inhabilitación y, en consecuencia, no cabe la prisión preventiva.Perales Sanchis y López Santisteban jefes de la Brigada Regional de Policía Judicial y del grupo de Estupefacientes de Valencia, respectivamente, fueron los instructores del expediente abierto contra el subcomisario Miguel Herrero después de que éste fuera denunciado por los dueños de cinco clubes, que le acusaron de haber recibido de ellos un millón y medio de pesetas a cambio de protección.

La acusación surgió después de que la policía encontrara sospechosamente cerrados los locales de alterne de quienes acusaron después a Herrero, que iban a ser objeto de una redada ordenada por el juez Forteza. La versión ofrecida por la policía al juez sobre el origen de la denuncia es que, probablemente, alguno de los reyezuelos del mundo de la prostitución, afectado por anteriores redadas de Forteza, se sintió agraviado por la presunta protección ejercida por algún policía sobre clubes de la competencia y puso el hecho en conocimiento de la Jefatura. Llamados los cinco propietarios, declararon contra Herrero.

A raíz de esta acusación, fue presentada denuncia contra el subcomisario en el juzgado de guardia el pasado día 8 y el asunto recayó en el Juzgado de Instrucción número 14 de Valencia, cuyo titular es Guillermo Forteza. Herrero declaró que la imputación era falsa y que todo era un montaje. Al serle incoadas diligencias por presunto cohecho, el juez encontró supuestas irregularidades en el atestado elaborado por Perales y López.

Anomalías

Algunas de estas anomalías se refieren a la tardanza -tres días de retraso- de la policía en elevar el caso a la autoridad judicial y a que no fueran detenidos ni Herrero ni sus denunciantes cuando se tuvieron indicios suficientes de la existencia de un delito. El ministerio fiscal presentó una protesta y un recurso contra la detención de los dos comisarios por considerar que "las irregularidades cometidas por ambos no eran delictivas".La Dirección General de Policía ha sido requerida por el juez Forteza para que informe sobre las actuaciones habidas contra Miguel Herrero. Se supone que, tras varias declaraciones y careos entre los implicados, ésta será la última de las diligencias que practicará el juez, que en la semana entrante elevará a la Audiencia los dos asuntos, relativos a presuntos delitos de cohecho, el primero, y prevaricación, el otro. Por tratarse de funcionarios de policía -con fuero especial-, el procesamiento o sobreseimiento ha de ser decidido por un tribunal colegiado.

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