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LAS CONSECUENCIAS DE LAS ELECCIONES

Alzaga y Segurado negociarán por separado con el PSOE para conseguir grupo parlamentario propio

Anabel Díez

Los presidentes del Partido Demócrata Popular (PDP) y del Partido Liberal (PL), Óscar Alzaga y José Antonio Segurado, respectivamente, abrirán inmediatamente contactos con el PSOE para que éste se avenga a modificar el reglamento del Congreso y ambos puedan tener grupo parlamentario propio, al margen de Alianza Popular (AP). Los dos políticos realizaron ayer esta declaración, en presencia de Manuel Fraga, después de que los tres hubieran compartido uno de sus almuerzos "habituales". Fraga dijo que daba su conformidad a esta iniciativa, pero de una forma pasiva, y reconoció que existían diferencias de interpretación" en la forma según la cual debía funcionar parlamentariamente esta coalición liberal-conservadora.

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Fraga, AIzaga y Segurado intentaron mostrar una imagen de armonía ante los numerosos informadores que aguardaban el final de su almuerzo. No obstante, en todo momento se dejó traslucir una evidente falta de sintonía, principalmente entre Alzagay el presidente de AP. El dirigente dernocristiano Óscar Alzaga se refirió al borrador de reglamento interno, elaborado por AP, que Fraga le había entregado en ese almuerzo. "Lo voy a estudiar con el máximo interés, pero, desde luego, nosotros partimos de otro supuesto".El borrador aliancista de un nuevo reglamento interno para la coalición no hace sino reproducir las reglas de funcionamiento que han estado vigentes para la coalición en el anterior cuatrienio. Esto es, la calificación de grupo para el PDP, que en esta legislatura se otorgaría también al PL, pero sin el aval fundamental que supondría que éstos fueran verdaderos grupos parlamentarios ante los ojos oficiales de las cámaras.

Este reglamento, que será estudiado este fin de semana por Alzaga y Segurado, suscitó la sonrisa en los dirigentes de estos partidos, que se limitaron a decir que en breve presentarán "enmiendas". Alzaga se mostró ayer especialmente cauteloso en sus palabras, que fueron seguidas por Manuel Fraga con cierta sonrisa de temor. El político democristiano se negó a admitir -la posibilidad de engrosar las filas del Grupo Mixto,en el supuesto de que no obtuviera el suyo propio. "Yo no quiero el Grupo Mixto, quiero grupo propio", dijo, mientras Fraga bajaba la mirada.

Alzaga informó que el próximo martes comenzarán los contactos con el PSOE para exponer formalmente la petición de modificar el reglamento. En idénticos términos se expresó José Antonio Segurado.

La vaguedad de Fraga

El discursó más vago fue, sin duda, el de Manuel Fraga, que no dejó de repetir el vocablo "trascendente" para calificar el momento que vivía Coalición Popular. "Hemos iniciado el análisis de la situación, que es muy complejo y en el que hay diferencias de apreciación". Tras afirmar, con tono de sorna, que la Coalición "no se ha roto", Fraga dijo: "La trascendencia del momento obliga a una máxima imaginación para interpretar los deseos de nuestros partidos" Fraga dijo que se estudiaría, con vistas a los pactos para las elecciones autonómicas y municipales de mayo de 1987, la posibilidad de hacer "varios trajes a medida," como fórmula de convivencia de los partidos coligados. "Hay que hacer nuevos pactos y nuevos trajes para los próximos comicios" puntualizó.

Sin ambages y particularmente serio, en contraste con un sonriente Fraga, se mostró Óscar Alzaga. "Para hacer un buen trabajo de oposición, nuestro partido debe ten er grupo parlamentario propio", repitió. José Antonio Segurado, tras manifestar la misma línea de pensamiento, descartó, en todo caso, que los parlamentarios liberales fueran a ocupar los escaños; del Grupo Mixto en el caso de que no obtuvieran grupo propio.

Al margen de estas declaraciones públicas, en fuentes del PDP, no se ocultaba ayer el malestar por la respuesta ofrecida en AP ante sus peticiones de autonomía. "Para ellos, la coalición es sólo AP, y pretenden ahogar cualquier especificidad ideológica", dijeron.

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Sobre la firma

Anabel Díez
Es informadora política y parlamentaria en EL PAÍS desde hace tres décadas, con un paso previo en Radio El País. Es premio Carandell y Josefina Carabias a la cronista parlamentaria que otorgan el Senado y el Congreso, respectivamente. Es presidenta de Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

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