Marruecos controló a Polonia y tuvo ocasiones para ganar

E. P. DE ROZAS ENVIADO ESPECIAL. El domingo sirvió para que se produjera la primera injusticia de este Mundial de México, cuando aquel, australiano no concedió el precioso gol de Michel. El lunes, para, que surgiera la primera sorpresa, pues, en un precioso estadio semivacío, la selección de Marruecos consiguió empatar a cero con la poderosa Polonia, en la que su estrella, Zbigniew Boniek, estuvo a la misma altura que en la jornada anterior había estado su ex compañero de equipo en la Juventus, el francés Michel Platini, frente a Canadá; es decir, totalmente ausente del encuentro.

Marruecos, que, de no haber querido meter los goles a la brasileña, se habría llevado el partido, tuvo siempre controlado el encuentro con gran facilidad. Polonia no dio en ningún momento sensación de poder ganarlo. Es más, los polacos se habrían podido pasar todo el día jugando y no hubieran podido marcar un solo gol. Marruecos fue ayer la imaginación, la habilidad y la gracia. Polonia únicamente mostró consistencia, contundencia y mecanismo, cualidades generalmente insuficientes para ganar un partido. Por eso, las cosas más bonitas las hicieron los africanos. A menudo fallaron por querer hacerlo demasiado bonito.

Los torneos ligueros, y esta primera fase de la Copa del Mundo se disputa con esta fórmula, suelen tener partidos excelentes y encuentros aburridos. Dentro de una semana nadie se acordará de este Polonia-Marruecos. Ni falta que hace. Pero, eso sí; los marroquíes pueden sentirse orgullosos.de contar con un equipo que planta cara a cualquier conjunto de la elite mundial. Los marroquíes jugaron magníficamente.