Una niña muere al ser arrollada por el 'pulpo' del Parque de Atracciones
Azucena Hernández Ocaña, de ocho años de edad, murió ayer en un accidente ocurrido sobre las 16.45 en el Parque de Atracciones de Madrid. La pequeña iba montada con su madre en una barquilla de la instalación conocida como el pulpo. Los responsables del parque niegan que se produjera un fano técnico, y varios testigos -entre ellos, Jesús Hernández, padre de la niña- afiman que el brazo del pulpo golpeó en el suelo y la barquilla donde Azucena iba con su madre chocó también contra el suelo. La niña salió despedida y fue arrollada por el aparato.
La familia Hernández Ocaña, domiciliada en Borox (Toledo), estuvo ayer en Madrid para celebrar la primera comunión de dos primos de Azucena. Posateriomente, se trasladó al Parque de Atracciones, donde se produjo el. accidente que causó la muerte de Azucena."La barquilla- donde iban mi mujer y mi hija golpeó en el suelo delante de donde yo estaba. No pude hacer nada.. Fue horrible ver que el aparato arrastró hasta tres vueltas a mi hija", dice Jesús Hernández Santurde, obrero en paro, de 35 años. La madre de Azucena, María Jesús Ocaña Pérez, también resultó heridacm la cara y fue asistida en la enfermería del Parque de Atracciones. Seguidamente fue trasladada al hospital Clínico de San Carlos. Azucena Hernández fue llevada inmediatamente en una ambulancia del parque al hospital Primero de Octubre, donde ingresó cadáver, según información de dicho hospital.
María Jesús Ocaña no conocía el fallecimiento de su hija cuando fue trasladada al centro médico. Además, resultaron heridas de carácter leve otras dos personas. En el Primero de Octubre confirmaron que allí estaban siendo atendidos Julián Alonso, de 48 años, y Mercedes Vázquez, de 17 años.
Cecilio Gavarrini, director general del Parque de Atracciones de Madrid, indicó que, de momento, se desconocen las causas del accidente. Gavarrini apuntó, sin embargo, que, de acuerdo con la información del encargado del aparato, no se produjo ningún fallo técnico.
Un brusco descenso
En otra de las barquillas iba Mercedes Vázquez, que resultó contusionada, con la niña Elena María Ocaña, de nueve años, a cuya primera comunión había asistido Azucena. Según Mercedes, el aparato sufrió un brusco descenso que hizo que las barquillas golpeasen contra el suelo. Mercedes explicó que Elena saltó de su lado, pero se pudo sujetar a la barra protectora. Sin embargo, vio que en la barquilla en la que iban María Jesús y Azucena la niña caía fuera.Otro testigo, Ángel Llorente Ruiz, de 36 años, que esperaba turno con su familia para montar en el pulpo, asegura: "Las cabinas del pulpo suben y bajan y, en un momento, una de ellas ha debido de bajar más de la cuenta, ha botado en el suelo y la niña ha saltado despedida". Según este testigo, el coche que venía por detrás golpeó y arrastro a la niña. "La niña murió en el acto. La madre sufrió un ataque de nervios y fue llevava al servicio de asistencia, donde debía de haber uno o dos sanitarios, pero no médico, porque pidieron uno por los altavoces".
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