El presidente no puede hacer declaraciones

Juan Font Jarabo, presidente de la corrida de ayer, no puede hacer declaraciones. El Jefe Superior de Policía de Madrid, Antonio Garrido Fernández, ha prohibido a todos los presidentes, que son comisarios de policía, y, por tanto, están a sus órdenes, cualquier contacto con la Prensa. Así, Font, muy a su pesar, no podrá dar explicaciones de los incidentes que ocurrieron ayer en Las Ventas con los caballos de picar. "En el acta está todo, pues sé muy bien lo que ha pasado", afirma Font, "pero no puedo contarlo. Espero me disculpen".

Como consecuencia de la nefasta actuación de los caballos, uno de ellos, el que se utilizó para picar al cuarto novillo, resultó corneado. Al finalizar el festejo estaba siendo cosido en el patio de arrastre, sujetado por todos los monosabios, ya que la operación se hacía sin anestesia. El cirujano no era ningún veterinario, sino uno de los citados monosabios; y el público, alrededor, contemplaba la escena, con lastimosos y desagradables comentarios.

La banda de música

El maestro Juan Baquero, 80 años, madrileño, cumple su 30ª temporada consecutiva dirigiendo la banda de música de Las Ventas. Durante este tiempo ha amenizado más de 1.500 festejos. "Pero no me acuerdo de ninguno en especial", dice; aquí estoy pendiente de que las notas suenen bien".

En la actualidad, la banda consta de 17 músicos profesionales que comparten sus actuaciones en la plaza de toros con otras en grabaciones, bailes y bodas.

La contratación la hace cada año la empresa con el director, que no quiere hablar de cifras, "Aunque desde luego", afirma Baquero, "no nos llevamos millones, sino una cantidad muy modesta y un pase para todos los espectáculos".

La ubicación de la banda de música en Las Ventas no cumple con el reglamento, que señala "que deberá estar lo más alejada posible de chiqueros", y en esta plaza se sitúa prácticamente encima, en la grada del tendido 2.

Característica muy sabida de la música en Madrid es el silencio de la banda mientras actúan los toreros. A Baquero le parece bien: "Y no por tradición, sino porque la gente y el mismo torero se distraen, como prueba que éste pida en otras plazas a la banda que se calle cuando va a entrar a matar. Por regla general, la música suena en Las Ventas siempre que no se halle con vida el animal en el ruedo".

Otra de las costumbres de la Monumental es acompañar el paseíllo de los diestros cada vez con uno de los 200 pasodobles de repertorio de que dispone la banda. En otros lugares es propio que suene el mismo todas las tardes para este desfile. "Pues no lo había pensado, pero si hubiera de elegir uno, ¿cuál más adecuado que el que se titula Toros en Las Ventas?", dice el maestro.

Baquero se considera un buen aficionado "ya desde antes de tocar aquí, cuando ejercía también como director de bandas en el Ejército", según comenta, antes de indicar cuáles son sus diestros favoritos: "Me gustan los de la línea artística, como Antonio Bienvenida, Paco Camino y Antoñete".