Joan Reventós: "El desaprovechamiento del Senado es corregible con voluntad política"

Joan Reventós, presidente del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC) y hasta ahora embajador de España en Francia, ha sido el único alto cargo de la Administración socialista al que se le ha permitido dimitir para presentarse a las próximas legislativas como candidato a senador por Barcelona. Reventós confiesa que ya marchó hace tres años a París con la idea de que su futuro político pasarla por el Senado.

Joan Reventós ha decidido firmemente no volver a presentarse nunca como candidato a la presidencia de la Generalitat. Le atrae más su eventual incorporación a la Cámara Alta: "Creo que hay un des aprovechamiento del Senado que puede corregirse con voluntad política", afirma.Pregunta. ¿Ha vuelto usted porque le han ofrecido la presidencia del Senado?

Respuesta. He vuelto porque las relaciones hispano-francesas atraviesan un buen momento y puedo dar paso a otro. Mi puesto está en la política catalana. No ha sido una decisión improvisada: estaba pactada con las más altas instancias desde mi designación como embajador.

P. Se habla de usted para presidir la segunda cámara legislativa...

R. Tengo voluntad de materializar el punto de referencia que pretendo ser en el PSC a través del Senado. He reflexionado mucho sobre la labor que se puede realizar desde esa cámara. Yo también he oído lo de la presidencia, pero eso me crea incomodidad. Ahora hablar de ello me parece prematuro, inoportuno y fuera de lugar. Sólo, soy un candidato al Senado.

P. ¿Aceptaría la presidencia del Senado?

R. Hasta el 23 de junio no quiero pronunciar una palabra más sobre la cuestión. El resultado electoral será determinante. Mientras, todo son especulaciones. Pero esa posibilidad no está entre las que descarto.

P. ¿Cómo enjuicia la tarea global del Senado?

R. Creo que hay un desaprovechamiento del Senado que puede ser corregido con voluntad política. En varias direcciones, y sin que ninguna presuponga una reforma constitucional. La Constitución no debemos cambiarla, al menos en ocho años. Por el contrario, hemos de tener la, visión suficiente para aprovechar, con la, Constitución actual, todas las potencialidades de la segunda cámara.

P. ¿Qué nuevas funciones le daría usted al Senado?

R. Nuestro Senado ha servido fundamentalmente para perfeccionar los proyectos de ley, y debe acentuar este papel porque es una medida cautelar que debe aprovecharse al máximo. Probablemente, ése ha sido, el campo en el que ha funcionado mejor, aunque es cierto que los senadores reflejan los mismos intereses de partido que los diputados. Por eso debería estimularse con voluntad política el carácter de cámara territorial que la Constitución le atribuye.

P. ¿Hay que potenciar al Senado exclusivamente como cámara territorial?

R. Creo que no sólo hace falta eso. Habría que darle una atribución que ya existe tradicionalmente en el parlamentarismo europeo: la creación de comisiones senatoriales para estudios, encuestas o investigaciones especiales. No se trata sólo dé controlar al Ejecutivo, sino de dinamizarlo. Por ejemplo, la reforma educativa inglesa se realizó a partir de las conclusiones de una comisión de la. Cámara de los Lores. Además sería una excelente fórmula para integrar los planteamientos de todas las fuerzas políticas españolas.

P. ¿Cree que el Senado debería ejercer un control más estrecho de la acción de Gobierno?

R. Me preocupa ese aspecto, que se podría materializar a través de una especial vigilancia en el desarrollo reglamentario de las leyes. La reglamentación es una potestad específica del Gobierno, pero convendría que el Senado asumiera el control de estos reglamentos, para que no se introduzcan aspectos que alteren la voluntad del legislador.