El temporal impide la búsqueda de 15 desaparecidos en las costas gallegas

El mal estado del mar debido al temporal que azota las costas del norte de España impidió el jueves la búsqueda de 15 personas que desparecieron en aguas próximas, a Galicia en tres accidentes ocurridos desde el pasado lunes, según informa Efe.Los desaparecidos son nueve marineros del mercante griego Erika II, hundido el pasado lunes sesenta millas al norte del puerto de Ribadeo, cinco ocupantes del pesquero coruñés Volverán, también hundido el lunes, y un marinero que desapareció en aguas del puerto lucense de Burela.

Un helicóptero del SAR (Servicio Aéreo de Rescate) pudo recoger a dos marineros del mercante griego, que se encuentran actualmente en La Coruña, mientras que de una balsa desaparecieron otros nueve ocupantes de este barco, cinco griegos y cuatro ghaneses. La tripulación del helicoptero logró avistar dos cadáveres, que flotaban en el mar, aunquese ignora si puedieron ser recogidos por un mercante liberiano que navegaba por la zona.

Tampoco se ha logrado saber nada del marinero Santiago Balseiro Orol que cayó al mar en el puerto de Burela cuando el pesquero Pena do Altar acababa de zarpar. Ayer continuaba la mar muy gruesa, con olas que ponían en peligro la navegación.

Desguace de un buque en Oviedo

Las labores de desguace del buque Grand Felicity, encallado y partido en dos en la zona de La Providencia, en Gijón, se iniciaron el pasado jueves. La empresa Grúas Caftibano, de Avilés, recibió la adjudicación de las obras en la tarde del miércoles, y las inició con el intento de recuperar las 400 tonela.das de combustible que permanecen en los tanques del buque. La empresa pretende reafizar esta operación por calentamiento del fuel, que será bombeado a unos camiones cisterna de Campsa, según informa desde Oviedo Mario Bango.

Los pescadores gijoneses han denunciado, al mismo tiempo, que los efectos de la marea negra del Castillo de Salas durarán aún Varios meses. El desguace del Grand Felicity se ha iniciado con gran celeridad, precisamente para evitar que se repita el caso del Castillo de Salas, que estuvo mes y medio enibarrancado sin que se realizara ninguna operación de rescate ni de obtención de su combustible.

Por otra parte, la compañía Musini, aseguradora del bulkarrier Castillo de Salas, llegó a un acuerdo con los pescadores de la zona e habían iniciado un encierro en la Casa del Mar, suspendido poco después- para abonarles 37 millones de pesetas en concepto de indemnizaciones. Los pescadores llevan tres meses sin faenar a causa del accidente.