Funcionarios de prisiones preparan encierros para reclamar mayor seguridad

Comisiones Obreras de Prisiones prepara para el próximo día 12 de diciembre, encierros en todas las cárceles españolas para protestar por la inseguridad "que raya con lo paranoico" a la que están sometidos los funcionarios de prisiones. El sindicato, que dice agrupar a 1.400 funcionarios de prisiones de los 6.000 existentes en España, reclama la reforma del Código Penal, en el sentido de que agrave las penas para la detención ilegal de los funcionarios de prisiones e intensifique la lucha contra la droga en las cárceles. También piden la reforma del reglamento para que fijen mayores sanciones a los internos en el caso de secuestro de funcionarios.Según fuentes del Ministerio de Justicia, "el vigente reglamento penitenciario contiene los suficientes instrumentos legales para garantizar la seguridad de los centros".

CC OO afirma que la situación caótica en la que se encuentran actualmente las prisiones españolas "viene heredada del anterior director general de Instituciones Penitenciarias, Juan José Martinez Zato". Según el sindicato el detonante de estas movilizaciones han sido los últimos acontecimientos acaecidos en la cárcel de Ciudad Real que tuvo como protagonista a El Vaquilla, así como las muertes de los dos guardias civiles en Granada con la posterior fuga de Antonio Maya.

Los funcionarios exigen un centro especializado, que de forma preventiva, acoja a delincuentes conflictivos. Según sus propias palabras "actualmente los más peligrosos se encuentran internados en prisiones provinciales, que no cuentan con las cotas de seguridad suficientes para impedir los incidentes". Por el mismo motivo en Granada, informa Francisco Terrón, la práctica totalidad de los 60 funcionarios que componen la plantilla de la prisión provincial se encuentran en huelga de celo y en asamblea permanente desde las 10 de la mañana de ayer para protestar por las deficientes medidas de seguridad de la cárcel.

Los funcionarios denuncian, entre otras cosas, la masificación que sufre la cárcel de Granada, con 350 reclusos, lo que supone "el doble de su capacidad". Mientras tanto continúa la huelga de celo y encierro de funcionarios en la prisión de Carabanchel, en Madrid, iniciado el pasado miércoles en apoyo de una tabla reivindicativa ante la Dirección General de Instituciones Penitenciarias. Los funcionarios piden la dimisión del equipo directivo de la dirección general de Instituciones Penitenciarias.

Según Eusebio Hernández, director de la prisión madrileña, "los funcionarios habían mantenido varias negociaciones con la Dirección General de Instituciones Penitenciarias en días pasados, pero esta acción de huelga la han empezado sin avisar, ni siquiera a la dirección del centro, a raíz del motín de Granada".