Perplejidad del juez del 'caso Catalana' por el optimismo de algunos de los querellados

El juez instructor del sumario seguido contra 25 ex consejeros de Banca Catalana, Ignacio de Lecea, mostró ayer su perplejidad por el tono jubiloso con que se ha dado a conocer el informe pericial por parte de algunos de los querellados en el proceso, que se consideran favorecidos por las conclusiones del peritaje. Lecea precisó que "lo relevante del caso no es el hecho de que existiera o no caja B en la contabilidad de Banca Catalana, sino la asignación de fondos para actividades que pudieron apartarse de la ortodoxia que sigue la gestión de un grupo bancario".De Lecea afirmó también que "el fermento que desencadenó la crisis estaba en el seno de este grupo bancario, con anterioridad a la intervención del Banco de España". El instructor manifestó que "efectivamente, si la gestión de Banca Catalana se hubiera ajustado a dicha ortodoxia, el destino de este grupo bancario habría sido muy distinto". "Estos criterios aplicados a la gestión corresponden más bien a la práctica desarrollada por algunos bancos pequeños, ya que los grandes aseguran la rentabilidad de los recursos que manejan", añadió.

De Lecea señaló que, en cuanto al contenido de la prueba pericial, todavía deben ser completados algunos puntos que permitan a las partes solicitar las aclaraciones pertinentes.