Los médicos no resultarán perjudicados, afirma Ernest Lluch

El ministro de Sanidad y Consumo, Ernest Lluch, rechaza que los profesionales de la Medicina vayan a resultar perjudicados por la ley ahora en debate en el Parlamento. De esta ley, de remuneraciones y de incompatibilidades, hablará los proximos días el ministro con el presidente de la Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM), Juan Blázquez."Las prioridades, para mí, respecto a los médicos, son éstas: dedicación, remuneración y por último, incompatibilidades", enumeró el ministro de Sanidad y Consumo.

"Las listas de espera en los hospitales cada vez son menores, la mortalidad infantil decrece notablemente, los médicos han comenzado a recuperar poder adquisitivo en los últimos tres años", dijo ayer a este periódico Ernest Lluch como argumentos en contra a las críticas de algunos sectores profesionales de médicos.

"Tampoco se puede hablar de clase médica ni de una posición homogénea: al menos hay tres posiciones. Yo trato de avanzar en el diálogo con todos, pero sin romper el equilibrio sanitario" dijo el ministro.

"Campaña de desprestigio"

No es ésta la opinión del doctor Carlos Ruiz Soto, diputado del Grupo Popular y ponente de la ley de Sanidad.: "La sanidad está llegando a su límite. Los profesionales están inmersos en una campaña de desprestigio, y se va a producir una tensión máxima con las incompatibilidades de los médicos, porque se les va. a dejar empobrecidos", asegura Ruiz Soto.El optimismo del ministro tampoco es compartido por las minorías nacionalistas. Lorenzo Gomis, de Minoría Catalana, afirma: "Esta ley es un atentado constante contra la capacidad legislativa de las autonomías". Compara este diputado la organización sanitaria que se pretende con el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido. "Se quiere implantar aquí cuando los británicos ya lo están revisando", dijo. Ana Gorroño, de la Minoría Vasca, observa que existe injerencia de la Administración central en la organización y financiación del País Vasco.

La aplicación de la ley despenalizadora del aborto en tres supuestos también es enjuiciada por ambos de forma antitética. "Hay una confusión enorme, pero, desde luego, no se puede obligar a un médico a practicar abortos. Van a tener que importarlos desde fuera, porque aquí nadie va a querer", pronostica el diputado de Alianza Popular Ruiz Soto. "Los médicos que han practicado abortos son los únicos denostados y desprestigiados", opinó Lluch.

El suceso en una clínica de Aranda de Duero (Burgos), donde una persona murió camino de un hospital, presuntamente por falta de asistencia médica en un centro privado, fue también objeto de comentario para el ministro Lluch, que defiende a los doctores del centro burgalés. "Creo que el comunicado de los médicos es correcto. No tengo ninguna razón para pensar que la versión de los doctores no es la verdadera", dijo el titular de Sanidad.