El equipo brasileño, favorito en la fase final

J. GARCÍA DEL MORALLos brasileños fueron los que inventaron el fútbol sala, según se dice. Debe de ser cierto porque los actuales campeones del mundo juegan mejor que nadie, haciendo fácil lo difícil, proporcionando espectáculo y marcando las diferencias con respecto a los demás. Son los artistas del fútbol sala. En la primera fase del II Campeonato Mundial han arrollado a sus rivales en los tres partidos disputados: 11-0 contra Argentina, 16-0 ante Holanda y 15-1 frente a Japón. Pases precisos, tiros desde cualquier posición, contraataques demoledores y orden en la defensa son, sus características.

"No es habitual marcar tantos goles en un partido" dice, sin embargo, el seleccionador brasileño, Julio César Vieira Lima, dando a entender que los rivales dé Brasil en esta primera fase han sido muy flojos. "Durante los entrenamientos preparatorios", continúa, "incluso perdimos algunos partidos contra equipos- brasileños" y, como disculpándose, añade que allí hay más igualdad porque los practicantes de este deporte se cuentan por millones". Seleccionar a 12 no debe de ser fácil.

Vieira afirma que "Brasil da un gran espectáculo en poco tiempo" y que para conseguirlo hay que aunar dos condiciones: "Disciplina y técnica son necesarias para poder hacer jugadas bonitas y marcar muchos goles. El fútbol sala no es bonito de ver cuando no hay jugadores habilidosos". Sus pupilos lo son. Hace dos años, en los Juegos Panamericanos, marcaron 31 goles al equipo de Estados Unidos en un partido. "Después de eso algunos pensaron que el fútbol sala se había acabado en ese, país", indica Carlos Alberto Gongalves Bittencourt, jefe de la delegación brasileña. "Pero... no; la gente quería ver a Brasil para aprender", prosigue, .porque meter 31 goles con el pie es muy difícil".

Hayelange, 'bestia negra'

Douglas Pirtoti, que juega de pivote y es uno de los máximos goleadores de la selección de Brasil, asiente y dice que "lo más normal -es que un equipo marque cuatro o cinco goles en un partido", aunque añade que él logró una vez nueve tantos. Lleva 13 años jugando al fútbol sala, deporte que no ha abandonado pese a que ha recibido ofertas de diversos clubes de fútbol, entre ellos el Fluminense, que se interesaron por él al ver su potencia de tiro y su habilidad con el pequeño balón.

Los brasileños no son en absoluto ajenos a la problemática que rodea al fútbol sala en España, que no es más que un reflejo de lo que están sufriendo en sus propias carnes. João Havelange, actual presidente de la Federación Internacional de Asociaciones de Fútbol (FIFA), es la bestia negra. Havelange, que fue el primer presidente de la Federación Internacional de Fútbol Sala (FIFUSA), presidida en la actualidad por el también brasileño Januario d'Alessio, es hoy en día el máximo enemigo de esta especialidad.

Bittencourt dice que "Havelange ha venido haciendo una campafía deshonesta en contra del fútbol sala; está totalmente en contra". Y añade que "la FIFUSA ha hecho todo lo posible para arreglar las cosas; pero ya se ha comprobado más de una vez que Havelange habla mucho, mas no cumple. Fundó la FIFUSA y ahora no la acepta. Si no fuera por él, el fútbol sala estaría mucho más arriba".

Las selecciones participantes en el Mundial de España visitaron ayer a Enrique Tierno Galván, alcalde de Madrid, quien definió el fútbol sala como "un deporte urbano" y renovó. su apoyo, dado que siempre se ha mostrado favorable a sus iniciativas, fuente de una inacabada polémica con el Consejo Superior de Deportes.