Inexactitudes sobre el laborismo

Las informaciones aparecidas en el diario EL PAIS sobre el congreso anual de los laboristas británicos nos obligan a enviarle estacarta con el único objetivo de aclarar algunos de los puntos en ellas contenidos.En EL PAIS (1 de octubre de 1985) dice su corresponsal en Londres que "el congreso anual del Partido Laborista británico rechazó ayer por abrumadora mayoría dos mociones presentadas por el sector radical del laborismo que pretendían el establecimiento de secciones separadas para los negros dentro del partido y la retirada de las tropas británicas de Irlanda del Norte".

Su corresponsal seguramente no ignora que lo que él llama "sector radical del laborisino" es bastante heterogéneo. La izquierda laborista va desde el grupo Tribune, pasando por Tonny Benn y su grupo, hasta la corriente marxista aglutinada en torno al semanario Militant.

Una de las constantes en las crónicas de su corresponsal es su absoluta ignorancia de Militant. O bien desconoce su existencia, o bien omite cualquier referencia a esta corriente obrera. Lo primero sería grave, ya que significaría que el señor Mendo no lee ni The Times, ni The Guardian, ni el Financial Times, periódicos que hablan de Militant constantemente, e incluso el primero llegó a dedicar más de un editorial a las ideas y perspectivas de esta corriente marxista.

Realmente, la ignorancia de la existencia de Militant ha llevado a su corresponsal a dar una información que no se ajusta a la realidad.

Al día siguiente (2 de octubre), Mendo dice en su crónica que "el Ayuntamiento de Liverpool dio la semana pasada un preaviso de despido a sus 31.000 trabajadores con el fin de poder hacer frente al déficit presupuestario y poder pedir más créditos". Esto está escrito con la evidente, intención de ratificar las palabras de Neil Kinnock recogidas en el párrafo anterior de la crónica, atacando brutalmente al Ayuntamiento de Liverpool, y que motivaron el abucheo del líder laborista por cerca de la mitad de los delegados al congreso, según nuestras informaciones.

Cualquier persona que lea esta información sacará la conclusión de que un Ayuntamiento dirigido por los marxistas de Militant está dispuesto a despedir a 31.000 trabajadores. Sin embargo, la realidad es exactamente la contraria. El Ayuntamiento de Liverpool envió las mencionadas cartas para poder obtener créditos bancarios para pagar las nóminas de los trabajadores, y sobre todo para ganar tiempo en su lucha contra el Gobierno Thatcher en defensa del nivel de vida de los trabajadores del municipio y del conjunto de los trabajadores de Liverpool.

De cualquier manera, sus lectores comprenderían muchísimo mejor lo que está sucediendo en Liverpool si su corresponsal hubiera Informado que el día 26 de septiembre el Ayuntamiento de Liverpool convocó una huelga general de 24 horas que contó con gran apoyo entre los trabajadores; que sus portavoces propusieron una huelga general de una semana en el seno del sindicato de trabajadores municipales, cuya propuesta fue derrotada por 8.500 votos en contra y 7.500 a favor debido a la postura contraria a la misma de la dirección del sindicato afin al partido comunista británico, y que el año pasado este Ayuntamiento hizo retroceder los planes de la señora Thatcher- Jesús María Pérez.