Las cajas rurales en saneamiento obtuvieron 2.672 millones de pesetas de excedente

Las 18 cajas rurales en saneamiento asociadas al Banco de Crédito Agrícola (BCA) han obtenido en el primer año del mismo unos excedentes de 2.672,7 millones de pesetas -500 millones por encima de las previsiones iniciales-, según anunció ayer José Barea, presidente del BCA. A pesar de que el conjunto de cajas rurales en saneamiento ha superado los objetivos, hay media docena de instituciones cuya rentabilidad está por debajo de la prevista. Por ello se estudia la posibilidad de que la Caja Rural de Sax, una pequeña institución comarcal, sea absorbida por otra de mayor volumen, lo mismo que la Caja Rural de Talavera, al considerarse que estas entidades no serán capaces de sanearse por sí solas, aunque sí englobándose dentro de una estructura mayor.

El resto de cajas rurales con problemas de rentabilidad son las de Palencia, Pontevedra, La Coruña, Cantabria y Jaén, aunque entre éstas los problemas son de distinta gravedad y las tres primeras están alcanzando ya los objetivos previstos, según Barea.

El BCA, según manifestaciones de su presidente, ha intermediado durante los últimos 12 meses un total de 76.000 millones de pesetas procedentes una parte -36.000 millones de pesetas- de las ayudas para el saneamiento de las cajas no utilizado directamente, y otra parte -40.000 millones- de los excedentes de liquidez que obligatoriamente tienen que depositar las cajas íurales en las cuentas del BCA. De estos 76.000 millones, 15.000 han revertido directamente en créditos a la agricultura, mientras que el resto se ha colocado en los mercados monetarios, especialmente en pagarés.

La obtención de resultados positivos se debe a un profundo ajuste en los costes de transformación -especialmente en los de personal por la importancia que tienen-, ya que los productos financieros han disminuido, en la misma proporción en que lo han hecho los costes del pasivo.