_
_
_
_

La Prensa europea elogia a los golfistas españoles tras el triunfo en la Ryder Cup

La primera conclusión de la histórica victoria de Europa sobre Estados Unidos en la Ryder Cup de golf pasa por reconocer los progresos del golf europeo y el actual estancamiento del norteamericano. Los resultados producidos en el presente año en las competiciones más importantes indican claramente que este deporte no es ya del exclusivo dominio estadounidense, y que Europa tiene en Severiano Ballesteros y Bernard Langer las principales figuras del golf mundial. La Prensa europea, y especialmente la británica, recogió ayer con grandes titulares el triunfo, destacando la importancia de los españoles en el triunfo. Esta ha sido la cuarta victoria no estadounidense en las 26 ediciones de la Ryder Cup, y la primera desde que los británicos abrieron las puertas de su equipo al resto de jugadores europeos.

La Ryder Cup necesitaba imperiosamente una victoria europea para no correr el peligro de convertirse en una competición sin importancia. Los 12 jugadores europeos partían con la ilusión puesta en varios objetivos: conseguir finalizar con la supremacía americana en la competición y demostrar que, pese a no tener un circuito tan millonario, son tan buenos o mejores jugadores que los norteamericanos. "Les hemos perdido el complejo y si invitaran a más jugadores europeos a sus grandes torneos seguro que conseguiríamos más victorias", manifestó Manuel Piñero, uno de los baluartes importantes del triunfo de Europa. La foto de Piñero abrazándose a Tony Jacklin, el capitán europeo, ocupaba tres columnas en el diario inglés The Guardian.La victoria del alemán Langer en el último Master, el triunfo consecutivo de dos europeos en el Open Británico, y la reconocida capacidad de Severiano Ballesteros se suman a la victoria europea en la Ryder para confirmar que Estados Unidos padece un grave momento. Con Jack Nicklaus en sus últimos años de carrera, con Tom Watson en pleno bache y sin una figura de peso, el golf estadounidense parece vivir su época más negra.

La derrota en la Ryder, celebrada por la British Airways con un paseo a baja altura del Concorde por el campo de Belfry, obliga a los norteamericanos a tomarse con mayor seriedad esta competición, que enfrenta a los 12 mejores jugadores de cada continente. Hasta ahora, para los jugadores estadounidenses ganar era una rutina. A partir de este momento, ganar será muy dificil. Desbancar a Ballesteros del título de mejor golfista del mundo también les va a costar, porque al carisma del español hay que sumar los progresos del alemán occidental Langer, que le sitúan como el segundo jugador mundial, pese a que aún le faltan importantes títulos en su historial.

La confirmación de Seve

Para Severiano Ballesteros, este triunfo significa la confirmación de una fulgurante carrera, cuyo mayor reconocimiento no se produce precisamente en su tierra natal, sino en las islas Británicas. "Ballesteros se negó a rendirse", es el título de un artículo publicado por The Times en su edición de ayer, en el que se alaba la reacción del jugador español en su último encuentro, donde fue capaz de igualar un partido que perdía por tres golpes a falta de cinco hoyos. "La gran diferencia entre el mejor y los 20 primeros del mundo radica más en la condición mental que en la técnica", escribió el articulista.Esta victoria continúa decantando la balanza a favor del golfista español en su lucha particular con el circuito norteamericano, que se inició con la negativa de Ballesteros a sacar la tarjeta necesaria para jugar torneos en Estados Unidos, continuó con sus triunfos en el Master y otros torneos menos importantes, y ha culminado con la victoria en la Ryder.

Para el golf español, la selección de cuatro jugadores españoles en un equipo de 12 hombres, en el que además se encontraban siete británicos y un alemán occidental, es señal muy positiva del elevado nivel que ha conseguido un deporte que todavía no deja de ser minoritario en España, pero cuyos triunfos en el extranjero alcanzan una resonancia superior a la de cualquier otro deporte. El único jugador europeo que no perdió un encuentro en la Ryder fue el español José María Cañizares, que jugó tres partidos, ganó dos y empató uno. Seve saldó su cuenta con tres victorias, un empate y una derrota. Rivero sumó una victoria y una derrota. Manuel Piñero fue el que más triunfos obtuvo de todo el equipo, cuatro y una sola derrota.

De ahí que en los tres días de competición la prensa británica no olvidara a los españoles a la hora de titular, sus informaciones: "Olé España"; "Fiesta española"; "Puro oro español" fueron los más llamativos. El diario francés L'Equipe calificaba la victoria como "un sueño", y a los 12 vencedores como "un maravilloso equipo europeo galvanizado por los españoles".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_