Grandes obras y la consolidacíón jurídica de la ORA centraran la actividad municipal
Las grandes obras urbanas y la consolidación de la cobertura legal de la Operación de Regulación de Aparcamiento (ORA) son los temas que centrarán la actividad municipal en el último trimestre del año. El equipo de gobierno, integrado por socialistas y comunistas, está dispuesto a dedicar todo el curso que llega a dar un empujón a las grandes obras urbanísticas.
La reconversión de San Francisco el Grande, la reforma de la plaza Elíptica y la glorieta de Carlos V, en Atocha, y las recién iniciadas de la Puerta del Sol, así como la creación de la plaza diseñada por Dalí, son los proyectos que tendrán que finalizar antes de que acabe el año 1986, a pocos meses ya de las elecciones municipales, previstas para mayo de 1987.En cuanto a la ordenanza de la ORA, todo indica que se recogerá expresamente en la nueva ley de Financiación de las Haciendas Locales, de modo que no quede resquicio juirídico alguno para que los particulares o el Defensor del Pueblo puedan recurrirla o considerar dudosa su aplicación.
Si el conflicto de la ORA puede resolverse con la ley de Financiación de Haciendas Locales, preocupa a la corporación el tema del tráfico de vehículos, y más cuando el caos circulatorio puede agravarse, fundamentalmente en la zona sur de la ciudad, debido a las obras ya mencionadas.
Estos temas y otros más van a ser discutidos este fin de semana en un retiro que el grupo socialista del Ayuntamiento y el equipo de gobierno van a celebrar en Galapagar. La reunión se iniciará el viernes con la asistencia de todos los concejales socialistas; el sábado se reserva al equipo de gobierno del Ayuntamiento. Allí estarán los dos portavoces de las facciones comunistas, el carrillista Adolfo Pastor y el gerar dista Francisco Herrera, incorporado al Gabinete tras la ruptura del PCE.
Uno de los temas importantes para el gobierno del Ayuntamiento va a ser el económico. En Galapagar se van a estudiar los presupuestos para 1986, en los que se incluyen los 7.000 millones de pesetas que la Comunidad de Madrid deberá hacer llegar al municipio como compensación a la supresión de las tasas de alcantarillado y recogida de basuras y la congelación de la ley del recargo del 3%. La comunidad autónoma se comprometió en su día a transferir esta cantidad, pero hay quien duda de que lo haga en su totalidad.
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