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Reportaje:

'Rambo', víctima de los vídeos piratas en Oriente Próximo

Parecía un trabajo para Rambo: piratas operando en Oriente Próximo han capturado a algunos de los más grandes héroes y estrellas de cine de todos los tiempos y estaban vendiendo sus servicios en el mercado negro. Pero aun Rambo, el hábil veterano de la película del mismo nombre, de Sylvester Stallone, ha sido víctima de uno de los mayores flagelos del mundo del cine: los vídeos piratas que no sólo distribuye ilegalmente esta película sino que ha cambiado, en los subtítulos, el guión para no herir la sensibilidad de los países del Este.

Haciendo uso de técnicas sofisticadas y distribuyéndolas masivamente, los piratas están robando clientes a los cines en alarmantes proporciones, además de establecer un mercado internacional, de gran poder económico. Chipre solamente tiene un número estimado de 600 tiendas ilegales de vídeo (una por cada 350 familias) y los propios piratas afirman que las autoridades chipriotas han hecho muy poco por detener su expansión. Una reciente víctima del comercio ilegal de vídeos ha sido la película Rambo, de Sylvester Stallone, que ha tomado un matiz especial.La acción de la película se desarrolla en 1985, 14 años después de que John Rambo, integrante del comando de boinas verdes, escapó de un campo de prisioneros de guerra en Vietnam. En el filme, regresa a este campo para rescatar a los prisioneros. No obstante, los vídeos piratas de Rambo que circulan en Oriente Próximo llevan subtítulos en francés y árabe con texto distinto.

Situado en Filipinas en 1943, la versión subtitulada tiene a Rambo volviendo, después de escapar dos años, antes, a rescatar a prisioneros de la II Guerra Mundial detenidos por los japoneses. Todas las fechas han sido adecuadamente sustituidas, a pesar de las escenas de acción con helicópteros lanzacohetes y otras armas de alta tecnología. Cuando en la banda original de sonido un soldado dice en inglés, de Rambo: "Tu sí que te has hecho una buena reputación en Vietnam", los subtítulos dicen: "Vaya nombre que te hiciste en Guadalcanal" (escena de una importante batalla de la II Guerra Mundial).

"Esto se ha hecho obviamente por razones políticas", manifestó un diplomático que ha visto la cinta pirata, al notar que los subtítulos evitan toda referencia a Vietnam y a la Unión Soviética. El director de la mayor empresa de tiendas de vídeos ilegales en Chipre afirmó que la película había sido "saneada" para su distribución en Oriente Próximo que, como Siria, mantienen buenas relaciones con la Unión Soviética y podrían sentirse ofendidos con el contenido de Rambo.

La versión subtitulada, que también ha sido distribuida en el Golfo, apunta a la creciente sofisticación del mercado negro del vídeo en la región, según afirma el mismo empresario, cuya tienda tiene más de 6.000 títulos de películas. Añadió que hay muy poco incentivo para las tiendas de vídeo en Oriente Próximo para legalizar su situación, debido al poco esfuerzo de su Gobierno para adecuarse a las convenciones internacionales al respecto. Los costes para obtener cintas originales de las películas populares legalmente superan unas 30 veces el precio del mercado negro. "Una vez traté de hacerlo legalmente. Un distribuidor británico me ofreció un paquete de 20 cintas por 60.000 dólares (casi 10 millones de pesetas)". Tras acudir a un télex de otra oficina que ofrecía vídeos en el mercado negro, descubrió que podía adquirirlos por menos de 100 dólares (16.500 pesetas).

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