El 'Fortuna' zarpo de Lekeitio para participar en la regata Wuitbread

El barco, español Fortuna salió ayer por la mañana de Lekeitio (Vizcaya), rumbo al puerto inglés de Portsmouth, para participar en la cuarta edición de la Wuitbread, la regata que durante siete meses llevará alrededor del mundo a 20 barcos de todas las nacionalidades. Las 27.000 millas (48.600 kilómetros) que deberán recorrer los barcos han convertido esta regata en una de las más atractivas. Las duras condiciones que deberán superar los prototipos y el elevado rendimiento esperado de las tripulaciones atrae la atención de una afición fascinada por los míticos lugares nombrados en los difíciles océanos

El barco español, que dará la vuelta al mundo bajo el patrocinio de Tabacalera Española, ha sido diseñado por el arquitecto naval Javier Visiers, copropietario del barco e inspirador, junto al abogado ibicenco Luis Trigueros, del proyecto desde 1981. En ese año manifestaron la intención de construir "un barco lo más nacionalizado posible, compuesto por elementos íntegramente fabricados en España".Construido en los astilleros de Javier Garriga, en Barcelona, el Fortuna ha participado desde su botadura en la regata Transmed -en febrero de 1984, desde el puerto francés de La Grand Motte hasta Alejandría, ida y vuelta- y en la más reciente Ruta del Descubrimiento. "En las dos regatas", afirma Javier Visiers, "comprobamos los resultados de un barco pensado para superar satisfactoriamente todas las condiciones de navegación".

La primera etapa de la Wuitbread, regata organizada por la Royal Naval Sailing Association, se iniciará el próximo 28 de septiembre en Portsmouth, al sur de Inglaterra, y comprende 7.010 millas (12.600 kilómetros) hasta Ciudad del Cabo, en Suráfrica. Auckland, en Australia, y Punta del Este, en Uruguay, son las dos escalas siguientes de un trayecto que finalizará en el mismo punto de partida en abril de 1986.

Para Javier Visiers, un diseñador naval que considera imprescindible navegar para averiguar las modificaciones y los nuevos hallazgos que precisa la industria naútica, la vuelta al mundo es una aventura imprevisible: "Entre el anticiclón del hemisferio Norte y el del Sur, junto a África, se abre la zona de las calmas ecuatoriales que a veces es más terrible que la tormenta. Y. en el Indico tendremos que sortear icebergs y soportar muy bajas temperaturas".

Para Tony Guiu, uno de los jóvenes patrones del barco junto a Jordi Brufau, "la tripulación ha sido escogida en función de esa íntima disposición humana que permite vivir en un espacio reducido y en condiciones extremas. No hemos reunido a los mejores navegantes individuales, sino a los que mejor podían formar parte de un buen equipo".

Estudiante de Ingeniería Técnica en Tarrasa, Tony Guiu tiene 23 años, participó en la segunda etapa de la anterior edición de la Wuitbread, con el barco Licor 43, y junto a Jordi Brufau capitanea a una de las tripulaciones más jóvenes de la competición.

En la embarcación también van Jesús Tello, Jaime Arcos, Héctor López, Manolo Romagosa, Luis Figuero y Javier Visiers, armadores del barco, Jan Santana, velero de profesión, además de Jon Inchaustegui, Isidro Martín, Albert Vargués, Jordi Blanc y Miguel López, un estudiante de COU, que, a sus 18 años, es elmás joven de la tripulación.

Según el director de cine Jon Inchaústegui, encargado por el departamento de coproducciones de Televisión Española de dirigir y filmar la aventura del barco español, "atravesar los tres cabos más temidos por los marinos -Finisterre, Buena Esperanza y Hornos- nos permitirá volver con tres pendientes en las orejas: los signos del prestigio en el mar".

La situación exacta de los barcos será conocida, a lo largo de estos próximos siete meses, gracias a los medios técnicos dispuestos por la Asociación de la Marina inglesa organizadora de la Wuitbread. En los barcos se ha instalado un sofisticado material que permitirá su seguimiento: un ordenador como elemento de navegación, una estación de recepción de datos meteorológicos, navegación por satélite, tres radios e instrumentos de viento muy precisos, en el caso del Fortuna.

El primer vencedor de la regata Wuitbread, en 1973, fue el Great Britain, que realizó el trayecto en 144 días y 11 horas. El último, en 1981, fue el barco holandés FIyer II, que empleó 120 días, 6 horas y 34 minutos.