El fuego obliga a desalojar tres urbanizaciones de Benicasim

Las tres urbanizaciones situadas en la zona del Desierto de las Palmas -Montornés, La Parreta y Dávalos-, en Benicasim (Castelión), fueron desalojadas ayer como consecuencia del violento incendio que se inició sobre las dos de la madrugada en el término de Cabanes, concretamente en la zona de Les Santes, y que anoche no había sido controlado aún. A este incendio, que ha dañado seriamente el pulmón natural más importante de aquella comarca, hay que añadir los registrados ayer en las provincias de Guadalajara, donde ardió parte de la ribera del pantano de Entrepeñas, Burgos y Tarragona.

La fuerza del viento contribuyó a que el frente de fuego del incendio de Castellón avanzara, e impidió al mismo tiempo el trabajo normal de los equipos que participan en la extinción. Al cierre de esta edición, el incendio seguía sin ser controlado, debido a las diferentes direcciones que toma ba el viento.En la extinción de las llamas participan dos hidroaviones; el helicóptero de la Diputación de Castellón, ocho motobombas, brigadas de los Servicios Fores tales, una compañíadel Ejército Guardia Civil, Policía Municipal de Benicasim y Castellón, ade más de personal civil. El fuego llegó a tener frentes de seis kilómetros y sobre las seis de la tarde se calculaba que habían ardido unas 1.000 hectáreas de pinar y arbusto.

La autopista A-7 tuvo que ser cortada entre las 14.40 y 15.30 horas como consecuencia del humo que impedía la visibilidad. La humareda se hacía bien patente desde Castellón, ya que los terrenos afectados se encuentran tan sólo a 10 kilómetros. Con este incendio se pierde definitivamente el más importante pulmón natural que había en la comarca, y que ya sufrió las causas del fuego en veranos anteriores.

Algunas urbanizaciones que daron desalojadas en la madrugada de ayer y otras lo fueron a lo largo del día. Ayer por la mañana fueron evacuados también el restaurante situado en pleno Desierto de las Palmas, el monasterio de los Padres Carmelitas y la Casa de Espiritualidad.

Repetidor de TVE

El fuego se acercó hasta las in mediaciones del repetidor de Televisión Española y las antena de transmisión de varias emisoras de radio local. Para poder trabajar adecuadamente en la extinción del incendio fue nece sario el corte del fluido de energía eléctrica, por lo que durante hora y media no se pudo ver la televisión ni escuchar las emisoras de radio afectadas.

Por la tarde quedó desalojada la urbanización Montornes, próxima a Benicasim, pero el fuego pudo ser dominado antes de que las llamas llegaran a los chalés.

Por otra parte, más de 1.500 hectáreas, según las primeras estimaciones, de la ribera del pantano de Entrepeñas, repoblada con pinos, encinas y monte bajo, de propiedad estatal, municipal y privada, han quedado devastadas por un incendio declarado ayer en esta zona de Guadalajara, informa Santiago Barra.

Las llamas se iniciaron hacia las tres de la madrugada de ayer, por causas aún no determinadas, en el barranco de La Cabeza, término de Durón, donde se encuentra un basurero. Debido al fuerte viento que reinó durante la noche, el fuego cobró una especial virulencia. Se extendió rápidamente por el término vecino de Gualda, y desde allí, posiblemente a causa de una piña o una pavesa, se propagó a la orilla opuesta del pantano, continuando por los términos de Cereceda, Mantiel y La Puerta. La extinción del incendio no se logró hasta pasado el mediodía de ayer.

Otro incendio se produjo ayer en el monte burgalés de la Abadesa. Con un frente inicial de algo más de un kilómetro, el incendio tardó tres horas en ser extinguido por dotaciones del Parque de Bomberos de Burgos.

Un incendio forestal de grandes proporciones, que anoche no había podido ser dominado, se declaró ayer en Tivissa (Ribera d'Ebre), en la provincia de Tarragona. A la misma hora pudo ser dominado otro siniestro registrado en Camarassa (La Noguera), de la misma provincia. En ambos casos el fuerte viento reinante dificultó la tarea de los efectivos que acudieron a luchar contra las llamas. Como consecuencia del fuerte viento, que llegó a alcanzar los 64 kilómetros por hora, 35 personas, en su mayoría practicantes de windsurf, tuvieron que ser rescatadas frente a las costas tarraconenses por lanchas de la Armada.