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La viuda afirma que ha vivido con el diplomático "los dos mejores años de mi vida"

Verónica Cousteau, la viuda del embajador asesinado, manifestó ayer telefónicamente desde Zimbabue que el cadáver de su marido fue encontrado en las afueras de la capital, Harare, bastantes metros lejos de su vehículo, con evidentes signos de haber sido apaleado por sus asaltantes. Verónica Cousteau, familiar del oceanógrafo francés Jacques Cousteau, llevaba dos años casada con el embajador. "Han sido", dijo, "los dos mejores años de mi vida. No habíamos tenido ningún problema en Zimbabue, donde estábamos muy contentos, y ahora pensábamos ir a España de vacaciones".La viuda de José Luis Blanco Briones, con voz apesadumbrada aunque firme, relató que le extrañó enormemente que su marido no hubiera llegado a su residencia a primera hora de la mañana, por lo que comenzó a llamar a la policía y a los hospitales de Harare por si el embajador había sufrido algún accidente, pero el resultado fue negativo. .

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Sobre las doce del mediodía, una persona descubrió un coche abandonado en las afueras de la capital y, a bastantes metros del vehículo, el cuerpo apaleado del" embajador. "Por las primeras impresiones", añade Verónica Cousteau, "parece que se ha tratado de un asalto en el que le robaron, pero no se sabe nada concreto todavía". Uno de los detalles más extraños y que podrían hacer variar el motivo del crimen es que, según relata la viuda del embajador, Ias placas de matrícula diplomática que llevaba nuestro Mercedes, el número 70CD, desaparecieron y se encontraron las antiguas, que correspondían a un turismo alemán. No sé a qué puede deberse esto, y me parece muy extraña esta desaparición".

Verónica Cousteau tuvo que desplazarse a un hospital de la capital donde se encontraba el cadáver de su marido para identificarlo, y posteriormente regresó a su residencia, siempre manteniéndose en contacto con el canciller. La delegación española en Zimbabue estaba compuesta exclusivamente por el embajador, el canciller y dos secretarias. La viuda del embajador explicó a la policía de Harare que su marido había salido a cenar con dos técnicos de la compañía española Construcciones Aeronaúticas, SA (CASA), y que no volvió a verlo hasta ayer en el depósito de cadáveres.

Verónica Cousteau afirma que nunca habían recibido ningún tipo de amenazas y Ilevábamos dos años viviendo felices en este paraíso". José Luis Blanco Briones tenía una hija de su primer matrimonio y se había casado hace dos años con Verónica Cousteau, con quien había permanecido todo este tiempo en Harare.

La capital de Zimbabue está considerada en medios diplomáticos como "una buena plaza del mosaico africano". Según las citadas fuentes, Zimbabue mantiene muy buenas relaciones con España, donde actualmente aumenta la presencia de empresas españolas y existen muy buenas perspectivas económicas para-éstas. La mínima colonia española nunca ha tenido problemas con los habitantes de Zimbabue.

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La viuda del embajador afirmó que, según los datos del canciller, el Gobierno de Zimbabue ha prometido una seria investigación para aclarar los hechos y llevar a los autores del asesinato ante la justicia.

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