Curren barrió a McEnroe del torneo de Wimbledon
Wimbledon abrió ayer sus puertas de par en par para recibir a un nuevo campeón que sustituya al de los dos últimos años, John McEnroe, eliminado sorprendentemente en cuartos de final por el surafricano nacionalizado estadounidense Kevin Curren. McEnroe, ganador en Wimbledon en 1981, 1983 y 1984 y finalista en 1980 y 1982, perdió frente a Curren por un humillante 6-2, 6-2 y 6-4. Ayer se completaron las semifinales. En el torneo masculino, el viernes se jugarán estos partidos: Curren (EE UU>Connors (EE UU) y Jarryd (Suecia>Becker (RFA). En las semifinales femeninas, Chris Evert jugará hoy contra Kathy Rinaldi, y Ddartina Naviratilova, frente a Zina Garrison, todas ellas estadounidenses.
John McEnroe sufrió ayer un duro castigo en la pista central de Wimbledon. "Pido que sean comprensivos conmigo. Ha sido mi peor partido desde que debuté en 1977'. Adormecido, sin reflejos, carente de la inspiración y de la imaginación que le llevaron a ser el número uno, McEnroe se convirtió en un juguete en manos de Kevin Curren. Sin fuerza en su servicio, sin velocidad ni reflejos en su juego en la red, McEnroe parecía limitarse a poner siempre la otra mejilla para recibir la bofetada de Curren. "Cuando acabé el partido, me sentía como si aún no hubiese jugado", dijo McEnroe. Y no jugó. Más bien, Curren jugó con él.Las tres mangas tuvieron una historia similar, y las tres pueden resumirse fácilmente. Curren sacó con toda la fuerza que posee, que es mucha, y buscó rapidas voleas porque carece de seguridad en los largos intercambios. Monótono en su perfección, Curren acertó además en sus restos. McEnroe no tenía la misma motivación que le llevó a la final en los cinco últimos años. "Es dificil ser el "número uno", dijo McEnroe. "Sé perfectamente cómo se sentía Borg cuando se retiró a mi edad. Si eres el número uno, es muy dificil ser otra cosa. Me siento frustrado, pero sé que volveré a ser el mejor, aunque desconozco cuándo será. Habrá que pensar seriamente en trabajar más. Frente a Curren me sentía totalmente dominado". McEnroe sentía la misma impotencia que vivió Connors frente a él, en la final del pasado año, cuando fue incapaz de entrar en juego. "En la tercera manga lo veía todo perdido, pero seguí luchando porque aún tenía la esperanza de que se rompiera el tobillo".
"Un joven de 27"
Kevin Curren, de 27 años, parece en la pista como un poste eléctrico imantado. Saca con una velocidad dificil de seguir por el ojo humano, y se planta en la red con la envergadura necesaria para controlar toda la pista. En 1983 ya eliminó a Jimmy Connors en octavos de final, con 33 aces, y perdió en semifinales ante el circense neozelandés Chris Lewis. Mientras McEnroe se siente "viejo a los 26 años", Curren dice ser "un joven de 27". El viernes jugará contra Connors (33 años en septiembre), que derrotó a al chileno Ricardo Acuña por 6-1, 7-6 y 6-2. Connors parece incombustible, y a su edad sigue vivo en el torneo mientras Lendl, Wilander y McEnroe deberán ver la final por televisión.La otra semifinal dará un finalista inédito en el torneo. El sueco Anders Jarryd, de 24 años, venció ayer al suizo Gunthardt por 6-4, 6-3 y 6-2, mientras el alemán occidental Boris Becker, de sólo 17 años, seguía su irresistible ascensión derrotando al francés Leconte 7-6 (91-7), 3-6, 6-3 y 6-4. Los dos hUos de Tiriac, el ex tenista rumano que dirigió primero a Leconte y que ahora está con Becker, jugaron el mejor partido del día. Becker necesitó toda su fuerza juvenil para contrarrestar el juego más elegante de Leconte. La muerte súbita de la primera manga decantó el partido para el alemán. Leconte llegó a tener una bola de set con 56, pero no la aprovechó.
Navratilova y Evert sólo están a un partido de terminar la eterna cuenta atrás que en los últimos años les lleva a encontrarse en las finales. Navratilova, sin embargo, parece menos dominante que antes. Ayer ganó a Pain Shriver por 7-6 y 6-3, perosu raqueta no fue la escoba con la que barría a sus rivales en otros tiempos. Navratilova parece atravesar el sindrome del número uno. Se sentía inaccesible en su sillón de reina del tenis. Su interés se decantó hacia su biograria, que se acaba de editar, pero de pronto han surgido los problemas en la pista. Chris Evert ganó a Barbara Potter por 6-2 y 6- 1, y de nuevo no tuvo necesidad de estropear su peinado. Evert jugará contra Katy Rinaldi, que a los 18 años es una veterana del circuito, donde comenzó a los 14. Rinaldi venció a la checa Sukova por pintoresco 61, 1-6 y 6-1. Navratilova jugará contra la estadounidense Zina Garrison, de 21 años, que ganó a Van Nostrand por 2-6, 6-3 y 60.
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