Fijados los cupos para reducir este año el Ejército en 1.400 militares
Madrid El Ministerio de Defensa ha publicado en su boletín oficial los cupos de militares profesionales que, de acuerdo con la ley de Plantillas, aprobada el pasado año, deben corresponder a la reducción de personal prevista para el Ejército de Tierra antes de que concluya este año. La ley prevé reducir el Ejército de 41.000 a 35.000 hombres en cinco años, y los cupos de reducción para 1985 ascienden aproximadamente a 1.400 profesionales.
En la correspondiente orden ministerial, Defensa incluye los cupos existentes este año para cada arma o cuerpo, así como para cada graduación. De forma voluntaria, los militares que deseen cubrir esos cupos deberán solicitar el pase a la denominada reserva transitoria, situación en la que permanecerá, cobrando íntegramente los salarios, hasta e momento en que les hubiera correspondido pasar al retiro.Los cupos correspondientes a este año no han sido fijados de forma totalmente concreta por Defensa, ya que en algunas graduaciones, como la de coronel -actualmente sobran en el Ejército cerca de 1.000 coroneles-, o teniente coronel de Infantería el cupo ha sido señalado en la orden ministerial como "indeterminado", calificación que también ha sido empleada, por ejemplo, en el caso de los tenientes coroneles de Infantería.
Los cupos concretos fijados en la orden minísterial son de 1.005 personas, de los que 50 corresponden a tenientes coroneles -además de los de Infantería no determinados-, 113 comandantes, 402 capitanes, 194 tenientes, 39 alféreces y 196 suboficiales (subtenientes y brigadas). Se estima que los escalafones cuyos cupos han sido calificados de indeterminados superan la cifra de 400 hombres. El cupo sobrante más elevado fijado este año, en relación con las plantillas actuales, corresponde a los capitanes de la escala auxiliar: 94.
Los militares que deseen formar parte de estos cupos deberán solicitarlo antes del próximo día 1 de agosto. A partir de ese momento, el jefe del Estado Mayor del Ejército realizará el correspondiente informe sobre los solicitantes, y, por último, el propio ministro de Defensa decidirá qué militares pueden pasar a la reserva activa. Las respuestas serán comunicadas con anterioridad al 1 de septiembre. A comienzos del año próximo serán fijados los cupos correspondientes a 1986.
Una reconversión ventajosa
Ajustar la plantilla del Ejército a las necesidades actuales -que supondrá reducir en 6.000 hombres su actual plantilla- ha sido considerada como una reconversión ventajosa, sobre todo si se compara con las realizadas estos años en sectores como el naval o el siderúrgico.En el caso del Ejército, quienes se acojan a la reconversión lo harán de forma voluntaria, continuarán percibiendo íntegros sus salarios, se beneficiarán de las subidas que se produzcan en las retribuciones generales, ascenderán un grado en el momento en que les hubiera correspondido de haber continuado en activo, e incluso los gastos de un posible desplazamiento familiar para fijar su residencia serán cubiertos por Defensa.
Frente a estos hechos, Defensa difundió ayer un comunicado en el que se asegura que la Ley de Plantillas "supone un gran esfuerzo colectivo, con repercusiones personales en una gran mayoría de oficiales y suboficiales que han visto recortadas las expectativas que tenían en cuanto al desarrollo de sus carreras, pero en cualquier caso se ha respetado el derecho incuestionable del militar a la propiedad en el empleo".
La solución, añade el comunicado, es "equilibrada" y se ha buscado "una situación suficientemente atractiva para compensar en alguna medida el abandono del servicio activo".
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