_
_
_
_

Bjorn Borg,

el famoso tenista, conocido como el hombre de hielo por su rictus inalterable, rompió todos los esquemas el pasado fin de semana en Marbella al subir a bailar a un escenario con Kid Creole, que, junto con Las Coconuts, acababa de terminar su segundo concierto en España. Tras el concierto, Kid Creole visitó Puerto Banús para recalar en una discoteca. En ese momento también entraba Borg, y aunque ambos no se conocían, se estamparon mutuamente cuatro sonoros besos. Después, a las cuatro de la madrugada, Borg aceptó la invitación de Creole y bailó más de media hora al ritmo sabrosán marcado por el cantante.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_