El salario neto por persona aumentó un 7,9% el año pasado

El incremento salarial pactado en los convenios del año pasado fue superior al recomendado por el Gobierno para moderar la inflación e incentivar el empleo, según se pone de manifiesto en el estudio que sobre negociación colectiva en 1984 ha elaborado el Ministerio de Economía y Hacienda. En un año caracterizado por la ausencia de acuerdos entre sindicatos, patronal y Gobierno, la negociación de los convenios presentó una mayor conflictividad, una caída fuerte del empleo y una escasa reducción de jornada. El salario neto por persona aumentó un 7,9%.

El estudio del Ministerio se ha realizado bajo la dirección de Antonio García de Blas y con la participación de Santos Ruesga Benito y Pedro Ruíz de León Laguna. Se basa en una muestra de 416 empresas que dan ocupación a 850.000 trabajadores que pactaron 505 acuerdos laborales en 1984.Según el Ministerio de Economía, el año pasado el crecimiento del salario neto por empleado -que no incluye las cotizaciones a la Seguridad Social pagadas por la empresa- se elevó a un 7,9%, cifra que supera la recomendación del Gobierno del 6,5% pero que, sin embargo, queda algo por debajo de la inflación prevista para ese año del 8%. El crecimiento salarial por empleado fue mayor en la empresa privada (8,3%) que en la pública (7,2%), que también se salta el tope impuesto por el Gobierno, en parte debido a deslizamientos no previstos y a la influencia de convenios de carácter plurianual que no se vieron afectados por la limitación salarial dictada por el Ejecutivo.

Por sectores, los incrementos más elevados se registraron en industrias transformadoras de los metales y otras industrias manufactureras, sectores en los que también se produce un descenso notable del empleo. "Ello permite avanzar la hipótesis", dice el estudio, "de que se sigue manteniendo una línea de ajuste donde se acepta por parte sindical, al menos al nivel de los ámbitos de negociación individual, el intercambio de empleo por salarios". La caída en el empleo, no obstante, también estuvo muy influida por la reconversión industrial.

Reparto proporcional

El incremento salarial pactado se distribuyó en la práctica totalidad de las empresas con criterios proporcionales, lo que implica que no se ha alterado el abanico salarial. En cuanto a la revisión salarial según la desviación del índice de precios al consumo previsto y real, aunque no se tiene demasiada información al respecto, sí se afirma que casi la mitad de las empresas y trabajadores de la muestra (45% y 48%, respectivamente) han pactado cláusulas de este tipo, siendo más relevante su presencia en las empresas privadas y en sectores como instituciones financieras, transportes y comunicaciones. La masa salarial bruta -engloba todas las retribuciones y toda la Seguridad Social- supera por empleado los dos millones de pesetas.Se aprecia en el estudio que los sectores que mejor retribuyen son los de instituciones financieras, seguros, y energía y agua, mientras comercio es el que peor.

La empresa pública ofrece una retribución ligeramente inferior a la privada (2.068.000 y 2.112.000 de pesetas, respectivamente), aunque por sectores, la retribución es mayor en el comercio e instituciones financieras públicas con respecto a las privadas e igual en transformación de minerales, químicas y metal.

La jornada anual quedó el pasado año en una media de 1.802 horas frente a las 1.821 de 1983, lo que supone una reducción del 1% El absentismo disminuyó dos décimas y supuso el 5,3% sobre la jornada pactada.

Las empresas extranjeras y aquellas que no están sometidas a control de precios son las que han tenido mayores reducciones. El 77% de los trabajadores se vieron afectados por claúsulas de movilidad funcional y el 55,8% de movilidad geográfica. La productividad presenta una evolución poco positiva y son muy pocos los convenio con claúsulas para mejorarla.