Walesa ataca al tribunal que, juzga en Gdansk a tres dirigentes de Solidaridad

Lech Walesa, presidente del sindicato polaco Solidaridad y premio Nobel de la Paz, compareció en la mañana de ayer como testigo ante un tribunal de Gdansk que juzga a tres líderes de su sindicato. Los juzgados son Adam Michnik, Bogdan Lis y WIadyslaw Frasyniuk, a quienes los jueces atribuyen responsabilidades en la dirección de la estructura clandestina de Solidaridad. "Son tres inocentes a quienes se ha sentado arbitrariamente en el banquillo de los acusados" dijo Walesa, según medios próximos a los defensores.

"Yo tomé la iniciativa de aquella reunión", dijo Lech Walesa al juez Krzysztof Zieniuk, a propósito de un encuentro celebrado a instancias del propio Walesa en Gdansk el pasado 13 de febrero, en el cual los acusados fueron detenidos. Posteriormente a aquella reunión, a Walesa se le asignó residencia vigilada en la localidad de Gdansk, al norte de Polonia.Walesa llevaba puesta una camiseta en la que aparecía impresa la inscripción el hombre de acero, en francés, con el mismo grafismo que el del nombre del sindicato Solidaridad. El presidente del sindicato polaco dijo que "todo lo que sé de este asunto es que tres inocentes se encuentran ante el banquillo, pues no conozco ningún país del mundo donde se persiga a personas por haberse encontrado en un apartamento", añadió.

Según el presidente de Solidaridad, el objetivo de aquella reunión, a la que concurrió una decena de responsables del disuelto sindicato en la víspera de una importante alza de precios, estuvo motivada por "una voluntad común de ayudar al país".

En la reunión iba a discutirse una serie de medidas de presión, incluida la huelga, orientada a protestar por la subida de precios de alimentos decretada entonces.

Michnik, expulsado

Walesa reconoció haber firmado documentos de la TKK, denominación que se aplica a la dirección clandestina de Solidaridad, y subrayó que el objetivo de esta organización era "defender los acuerdos de agosto de 1980", fecha en la cual el sindicato Solidaridad había sido legalizado, para pasar en diciembre de 1983 a la ilegalidad tras el golpe del general Wojciech JaruzeIski. Tras la exposición de Lech Walesa ante el tribunal, Adam Michnik pidió la palabra, se puso en pie y, refiriéndose a Lech Walesa, dijo: "Lechu (diminutivo), debes estar contento. Solidaridad vencerá". El juez Zieniuk le expulsó inmediatamente de la sala. Era la cuarta vez desde el comienzo del proceso que Michnik era expulsado.A la salida de la vista, Lech Walesa,dijo que el juez le había dejado hablar libremente, hecho éste que contrastaba con la actitud que el magistrado adoptó ante los acusados.

El testimonio del dirigente del sindicato disuelto duró 55 minutos, y tras ello, Walesa condenó él encarcelamiento de personas por sus ideas políticas. Mostró su protesta por "el encarcelamiento de aquellos que adoptan la defensa de la patria contra la explotación y la pobreza" y califico el proceso que se sigue en Gdansk contra sus tres compañeros como una "provocación policial".

Walesa condenó también al tribunal por la "brutalidad no vista desde los días de Stalin". Respecto a la reunión por la cual habían sido detenidos los tres acusados, Walesa puntualizó que los asistentes fueron detenidos al poco de comenzar el encuentro, por lo cual no tuvieron tiempo de tratar ningún asunto de importancia. Señaló más adelante que el proceso había sido montado "sin ninguna prueba".

El tribunal oyó ayer el testimonio de dos expertos de la policía polaca que identificaron la voz de Bogdan Lis en una, grabación realizada durante un encuentro de este dirigente sindical con dos miembros de la policía política polaca, en la habitación de un hotel de Gdansk. Lis asegura que es una prueba trucada.