Las obras de reordenación de la Puerta del Sol restringirán más el tráfico a partir de agosto

El proyecto definitivo de reordenación de la Puerta del Sol, aprobado el pasado viernes por el Pleno municipal con el voto en contra del grupo de Coalición Popular, prevé la reducción a tres bocas de metro -actualmente son seis-, menor altura de la prevista para las farolas centrales y un cambio en la ubicación de los urinarios. Los 221 millones que se invertirán en la obra permitirán tener una nueva Puerta del Sol en octubre de 1986. Estas obras aumentarán desde agosto las restricciones al tráfico rodado por la plaza.

El anteproyecto de la Puerta del Sol, presentado hace unos meses, se ha pulido hasta en sus más insignificantes detalles: el número de cabinas cerradas y locutorios abiertos de teléfonos, la forma de los quioscos de lotería y tabaco, el modelo de los puestos de Prensa, las farolas, los accesos a los urinarios y la situación de las marquesinas de los autobuses y los pasos de peatones. Al final, y tras diversas discusiones con la Compañía Metropolitano, quedarán en la plaza tres bocas de las seis que actualmente dan acceso al metro: una en la acera existente entre las calles Mayor y Arenal; otra entre las calles Carmen y Preciados, y una tercera entre las de Carretas y Espoz y Mina. Entre Alcalá y carrera de San Jerónimo se instalarán los urinarios públicos.El pavimento, que cubrirá aceras y calzadas de toda la plaza, estará formado por bandas de losas de granito junto a los bordillos y las fachadas, y adoquines. Sobre el pavimento se colocará el mobiliario ya diseñado -desaparecerá la caseta que alberga los aparatos de control de contaminación atmosférica- y las dos fuentes que en el proyecto definitivo dejan de ser lucernarios sobre las galerías del metro.

Una vez aprobado el proyecto en sesión plenaria del Ayuntamiento, con el voto negativo de la oposición, el paso siguiente será adjudicar las obras por concurso, en el pleno del mes de junio que se celebrará el último viernes de este mes. El primer sector donde se actuará será la parte comprendida entre Montera, Alcalá; carrera de San Jerónimo y Carretas, lo que implica el cierre de la boca de metro entre Alcalá y carrera de San Jerónimo.

En el mes de agosto está previsto que la Dirección General de Infraestructura del Transporte tenga ya adjudicadas las obras del gran vestíbulo de metro, por lo que a partir de ese momento el centro de la plaza y parte de las actuales calzadas serán objeto de perforaciones para poder trabajar en el vestíbulo subterráneo a cielo abierto. Ello podría suponer una limitación aun más rígida en el tráfico de vehículos, que, en la actualidad, está permitida sólo a autobuses y taxis de 10 a 20 horas los laborables.

Plazos previstos

Para el mes de abril de 1986 las obras del metro tendrán que estar terminadas en superficie -en subsuelo continuarán nueve meses más- por lo que el Ayuntamiento, si se cumplen todos estos plazos, estará en condiciones de terminar la reordenación de la plaza en octubre de 1986. Entre las partidas del presupuesto destacan las farolas, que costarán 23 millones de pesetas; las dos fuentes (17 millones), los seis quioscos de prensa, los dos de lotería y tabacos (12,5 millones), las cinco cabinas y nueve locutorios de teléfonos (casi 7 millones), aseos y semáforos (12,6 millones cada apartado), instalaciones de electricidad y saneamiento (10 millones) y bordillos y adoquinados (57 millones).El proyecto, realizado por el departamento de Proyectos de Urbanización de la Gerencia Municipal de Urbanismo que dirige Fernando López Ortum, está firmado por los arquitectos, Fernando López Ortum y Antonio Riviére Gómez y, asimismo por Javier Ortega Vidal, que ha actuado como asesor designado por la Dirección General de Bellas Artes.