El abogado de José Barrionuevo solicita al juez que condene a EL PAIS por difamación

La vista de la demanda del ministro del Interior, José Barrionuevo, contra EL PAIS, por intromisión en su honor, se celebró ayer en el Juzgado de Primera Instancia número 16 de Madrid. Los abogados del ministro y de este periódico se mantuvieron en sus posiciones de aceptación y desestimación de la demanda, mientras el fiscal adoptó una solución salomónica pidiendo una aceptación parcial de la demanda. El fiscal, representante de los intereses públicos y dependiente jerárquicaniente del Gobierno, consideró que EL PAIS mezcló hechos y conjeturas en la información del caso Brouard, por lo que el periódico debe deshacer la confusión creada y publicar el fallo de la sentencia. El juez Ernesto González Aparicio dispone de cinco días para dictar sentencia.

La vista se celebró en medio de gran expectación y con la sala, de pequeñas dimensiones, abarrotada, principalmente por periodistas. En primer lugar intervino Santiago Muñoz Machado, abogado de Barrionuevo, quien afirmó que en las informaciones publicadas por El PAIS sobre el caso Brouard existió cierta animosidad y afán de descalificar al ministro y que la crítica fue desmesurada, notablemente hiriente y los calificativos, excesivos.El letrado señaló que los hechos publicados por este periódico que vinculaban a Barrionuevo con el relevo del fiscal Emilio Valerio del caso Brouard y sobre que ciertos servicios de información relacionados con los GAL tenían conocimiento de que se preparaba el asesinato de Brouard son falsos y constituyen una evidente agresión al honor de Barrionuevo, que EL PAIS, dijo, rectificó en parte sin alterar la sustancia de la difamación.

Santiago Muñoz insistió en que todos los testigos han afirmado que no hubo malestar ni enojo, sino preocupación del ministro por los oficios recibidos y que el fiscal Valerio no fue relevado, sino que se retiró voluntariamente del caso.

La tesis de que Barrionuevo es ministro y que las noticias se referían al ministro en su condición de autoridad no puede ser acogida, según Muñoz, porque eso sería decir que el honor de los ministros no es un bien jurídicamente protegido. "No hay difamación de cargo público que no alcance también a la persona que lo ejerce".

Intromisión, no lesión

Según el fiscal, José Lorca, EL PAIS no ha fabricado la realidad del caso Brouard, pero al rellenar los huecos de la información, introdujo conjeturas que podrían ser consideradas injuriosas para Barrionuevo.El fiscal estimó que la Prensa debe de tener cierto margen de excusa y así hubiera de haberse considerado con la primera información, pero agregó que la "repetida publicidad" con que ha tratado el caso, aunque no ha lesionado el honor de Barrionuevo, "constituye una intromisión en el honor del demandante". Por tanto pidió al juez que estime parcialmente la demanda condenando a EL PAIS a deshacer la confusión creada.

Libertad de expresión

El abogado de EL PAIS, Diego Córdoba dijo que su informe podría titularse "Agua, azucarillos y aguardiente", elementos de los que él ponía el aguardiente, único elemento con cuerpo, ya que el agua y el azúcar, aportados por el demandante, habían quedado diluidos por falta de consistencia.Dijo que la vista no era una más y que trascendía a Barrionuevo y a EL PAIS, porque en la misma se enjuiciaba "el derecho a la libertad de expresión. El derecho fundamental es la libertad de expresión mientras que lo otro son límites. El derecho de todo ciudadano a ex presar libremente sus opiniones no tiene otros límites que su veracidad".

Córdoba agregó que EL PAIS nunca se ha referido a la vida privada de Barrionuevo como él mismo ha reconocido en su confesión judicial y no podía haber ataque al honor del ministro, porque en todo caso sería delito de desacato, que es como se tipifican las injurias a una autoridad. El demandante precisó, no puede pretender que todo el mundo esté de acuerdo con él, y EL PAIS ha discrepado de su actuación política. El abogado hizo un detallado análisis de las informaciones publicadas, probando que eran ciertas, de acuerdo con lo declarado por los ministros y otros testigos en fases anteriores de este proceso.

Córdoba dijo que el ministro recibió fotocopia de los oficios de juez de instrucción número 1 de Bilbao, según declaraciones de cuatro testigos, y que las trasmitió al ministro de Justicia.

Respecto a la discrepancia sobre si hubo malestar o preocupación por los oficios, puntualizó que se trata de una disquisición meramente semántica. Brouard era el interlocutor de ETA para negociar, indicó Córdoba, y con el asesinato los planes del Gobierno se resintieron. EL PAIS no acusó a Barrionuevo de obstaculizar la investigación, sino que le decía que le estaban "colando un gol" porque existe una trama negra con relación con determinados servicios que sí están ocultando ciertos hechos delictivos. Todo eso tiene relación con la política del Ministerio de Interior, no con la vida privada del ministro, según Diego Córdoba.