Los socialdemócratas infligen a los democristianos su más grave derrota en Renania

Los socialdemócratas (SPD) consiguieron ayer la mayoría absoluta en votos y escaños en el Parlamento regional (Landtag) de Renania-Westfalia y el mejor resultado allí -52,1%, según los resultados definitivos- desde la fundación de la República Federal de Alemania. Los democristianos (CDU) sufrieron una espectacular derrota, con algo más del 36,5% de los votos, el peor resultado electoral de su historia en Renania-Westfalia.

El canciller democristiano Helmut Kohl y el presidente del SPD, Willy Brandt, protagonizaron una agria discusión ante las cámaras de televisión. Khol dijo que Brandt era un antiamericano y el líder socialidemócrata acusó a Kohl de mentir al pueblo.Los liberales (FDP) alcanzaron un 6% de votos, que significa al retorno al Landtag de Dusseldorf, de donde habían desaparecido hace cinco años por no llegar al 5% de los votos. Los verdes, aunque mejoraron su resultado de hace cinco años hasta un 4,5%, quedaron por debajo del fatídico 5%, que da derecho a tener representación parlamentaria en el Landtag.

El éxito del SPD y su candidato, Joharinés Rau, rebasó los cálculos más optimistas del Partido Socialdemócrata que, con una, táctica agresiva, apostando fuerte por la mayoría absoluta sin dejar abierta la posibilidad de una coalición con los verdes, ha conseguido el mejor resultado de su historia en el estado federado más poblado de la RFA.

El triunfo del SPD es el éxito personal de su candidato Rau, vicepresidente del partido, que tras la victoria de ayer se perfila como el candidato más firme a canciller federal en las próximas elecciones generales.

El resultado muestra también que los socialdemócratas (SPD) pueden intentar por sus propios medios -sin recurrir a coaliciones- a intentar recuperar importantes parcelas de poder.

El presidente del SPD, Willy Brandt, anunció ayer que el próximo objetivo son las elecciones regionales en el estado federado de Baja Sajonia, que se celebrarán el año que viene y pueden dar al SPD una mayoría en la segunda Cámara legislativa (Bundesrat) y una base sólida para intentar el triunfo en las elecciones federales de 1987.

El desastre de los democristianos (CDU), que perdieron un 7% de votos, se debe en parte a la total carencia de carisma de su candidato Richard Worms, que tiene aspecto de un honrado padre de familia absolutamente incapaz para el negocio político, pero sobre todo es una derrota para el canciller de la RFA, Helmut Kohl (CDU).

Fue Kohl quien lanzó a Worms como candidato, por maniobras internas dentro del partido (CDU), que sin duda pasará pronto la factura a su presidente y canciller. Contribuyó, además, al desastre democristiano (CDU) de ayer la política del Gobierno de Bonn, que en dos años y medio se ha mostrado capaz de reducir la inflación, reducir la deuda pública y aumentar el crecimiento económico, pero que al mismo tiempo incrementó en medio millón el número de parados desde que llegó al poder.

La polémica en torno a la visita del presidente norteamericano, Ronald Reagan, y el fracaso de la cumbre económica de los siete grandes en Bonn parece haber influido negativamente sobre el electorado de Renania-Westfalia, casi un tercio del total de la RFA.

Los verdes han pagado caros sus errores sobre la rotación de diputados, la negativa a colaborar en coaliciones de los fundamentalistas y, sobre todo, la desdichada actuación de un grupo de pederastas, que consiguió meter en el programa electoral durante una semana -luego fue retirada- la despenalización de las relaciones sexuales con menores de 14 años,

Los liberales (FDP) han conseguido volver al Landtag de Dusseldorf. Esto significa la continuación de la tendencia apuntada ya en las elecciones del pasado 10 de marzo en el Sarre y Berlín Oeste.

El FPD se vuelve a situar como la tercera fuerza política de la RFA y parece haber superado la crisis provocada por el cambio de pareja en Bonn, a comienzos del otoño de 1982, cuando acabaron con la coalición social-liberal SPD-FPD para llevar a Kohl (CDU) a la jefatura de Gobierno de la RFA.