Algunas compañías eléctricas estudian cotizar sus acciones en bolsas extranjeras

Varias empresas eléctricas españolas se encuentran estudiando la Posibilidad de cotizar sus valores en algunos mercados bursátiles extranjeros como un mecanismo de ampliación de su base accionarial y como un instrumento para dotar de mayor estabilidad a su cotización. La salida al exterior de estos valores se producirá a medio plazo y muy posiblemente coincidiendo con la integración española en la CEE. Por otro lado, todas las empresas del sector tienen ya perfilada su política de reparto de dividendos con cargo al ejercicio de 1984, que seguirá prácticamente la misma línea que en el año pasado.

Según fuentes solventes, Hidroeléctrica Española, la única empresa del sector que no había aún deshojado su margarita para este año, repartirá un 8% de dividendo neto, es decir el mismo que el pasado año. Como ya sucedió entonces, es previsible que Española destine una importante suma a reservas o deje una cantidad significativa como, beneficio no distribuible. El propósito de la empresa es cumplir a rajatabla la normativa del Ministerio de Industria sobre saneamiento financiero, pese al equilibrio que tiene la sociedad. Hidrola ya repartió un 4% a cuenta el pasado enero y tiene previsto añadir el 4% completario el próximo mes de junio.Otra sociedad del sector que repartirá un 8% neto será Unión-Fenosa, compañía que celebrará junta de accionistas el próximo domingo. La empresa ha destinado una cifra apreciablemente superior este año a amortizaciones, que pasarán de 17.696 millones de pesetas a una cantidad por encima de los 30.000 millones de pesetas. Iberduero, por su parte, desea superar el 8,5% neto que distribuyó el pasado año y, según fuentes de la empresa, es previsible que alcance el 8,75%-9%, dentro de una política de adecuar la rentabilidad de sus acciones a la realidad del mercado.

Mejorar la imagen

La tónica general del sector eléctrico es en este sentido mantener la misma política de dividendos del pasado año dentro de un ejercicio que se considera puente. No hay que olvidar que el año próximo las empresas se verán afectadas por las nuevas disposiciones del Ministerio de Industria sobre saneamiento financiero y cuyo objetivo, según declaraciones recientes de la directora general de la Energía, Carmen Mestre, es llegar a un punto de equilibrio financiero para el conjunto del sector y para cada una de las empresas en los próximos tres años.

Para esa fecha es muy posible que alguna empresa eléctrica española se encuentre cotizando en el mercado de Londres, según la opinión expresada recientemente por un alto directivo de una de las sociedades. La intención de las empresas que se encuentran estudiando tal posibilidad es ampliar la base de su accionariado y dotar de una mayor estabilidad a la cotización de sus valores. Asimismo, un objetivo no desdeñable de esta salida es dotar a las empresas de imagen y prestigio internacional de cara a sus prestamistas.

El mayor obstáculo que presenta la salida de inmediato de las empresas al exterior (concretamente a la bolsa de Londres) es el cumplimiento de los requisitos que estos mercados exigen a las empresas que solicitan la cotización. Se trata de la necesidad de presentar sus balances auditados por firmas de reconocimiento internacional en un período que puede llegar a los cinco años. Según la opinión del directivo mencionado sólo tres o cuatro empresas del sector cumplen en la actualidad este requisito.

No obstante, todo el sector eléctrico español ha estado sometido a auditorías exahustivas, realizadas por Arthur Andersen, en los dos últimos años. Asimismo, Industria, dentro de la normativa. sobre saneamiento financiero para 1985, ha incluido una exigencia adicional para que todas las empresas del sector presenten sus balances auditados a partir del próximo año y además que lo hagan de acuerdo a unas normas específicas. En este sentido el cumplimiento de este requisito no representaría un grave problema a medio plazo.

Por otro lado, UGT presentó ayer en Madrid las Jornadas sobre el Sector Eléctrico, que comienzan hoy en Barcelona. En las sesiones participan expertos como Martín Gallego, secretario general de la Energía; Carmen Mestre, directora general; Álvaro del Río, director del IDAE; Paulina Beato, presidente de REDESA; Victoriano Reinoso, Fernández Mato, Fabio Sarmiento y Feliciano Fuster.