La banca privada temía la posible nacionalización del Banco Urquijo Unión

Las ayudas que los seis grandes bancos privados han proporcionado para el reflotamiento del Banco Urquijo Unión, filial casi al ciento por ciento del Banco Hispano Americano, se han producido porque de otra forma la alternativa "era la nacionalición de este gran banco", según manifestó un alto ejecutivo de unos de los siete grandes. La situación del banco matriz -que ha sido la entidad de menor crecimiento en resultados durante los últimos años- aconsejó que las ayudas no alcanzaran cifras superiores. Los grandes bancos aportarán 15.000 millones de pesetas para el saneamiento del Urquijo Unión.

El proceso de negociación de las nuevas ayudas para el Banco Urquijo-Unión se llevó de forma directa entre el gobernador del Banco de España, Mariano Rubio, y el presidente del Banco Hispano Americano, Claudio Boada, quien, una vez que se dibujó el marco de las mismas, las trasmitió a los presidentes del resto de los grandes bancos, Central, Banesto, Bilbao, Vizcaya, Santander y Popular. De hecho, cuando los presidentes de los grandes bancos fueron a la primera reunión con el Banco de España ya tenían asumido que debían colaborar en el saneamiento.Para algunos de los responsables de los grandes bancos que participan en el saneamiento "la banca ve claramente que en estos momentos no se puede ir a pedir dinero público para salvar a un banco del tamaño del Urquijo-Unión" y por ello ninguno planteó problemas cuando se les pidió que pusieran entre todos 15.000 millones de pesetas que se amortizarán en un plazo largo para que no repercuta en las cuentas de resultados de los próximos ejercicios.

El Banco Hispano Americano, propietario del 97,5% de las acciones del Urquijo-Unión, participará en esta segunda fase de saneamiento con 10.000 millones de pesetas, a amortizar en las mismas condiciones que el resto de las entidades privadas. En fuentes del sector se señala que su contribución se corresponde con la situación de la entidad.

Mantener el capital

Aunque se consideró en un momento de las conversaciones entre el Banco de España y el Hispano una posible absorción de las pérdidas del Urquijo-Unión mediante una reducción del capital de esta entidad, se estimó que ello repercutiría de forma demasiado directa sobre la cuenta de resultados del Banco Hispano Americano que debería reflejar una pérdida similar con cargo a su cartera de valores en la que se integra su participación en el Urquijo-Unión.

La factura del saneamiento del Urquijo-Unión que se ha trasladado al resto de los grandes bancos no vinculados directamente con esa institución "no es muy fuerte", según indicaban responsables del sector y aleja que dicho banco pasara por el Fondo de Garantía de Depósitos, lo que habría supuesto su posible nacionalización dado su volumen, y unos quebrantos muy importantes para el Hispano que habría visto reducido a una milésima parte (20 millones de pesetas) la valoración de los 20.000 millones de pesetas que tiene invertidos como capital en el Urquijo-Unión.

El saneamiento decidido para el Urquijo-Unión ha supuesto separar, de forma clara, la actividad del banco matriz -que ha visto consolidado el valor de su inversión en la filial- y la de esta última, que tendrá, a partir de ahora, que contar con sus propias fuerzas para ponerse en rentabilidad dentro del calendario de ayudas inicialmente acordadas cuando se adjudicó al Hispano la mayoría de las acciones de Bankunión y del Banco Urquijo.