Enfrentamientos de UGT de minería con la Dirección General de Minas

Nicolás Redondo, secretario general de UGT, se ha negado a intervenir en el enfrentamiento abierto entre la federación de minería de UGT, en la personas de su secretario general, José Antonio Saavedra, y el director general de Minas, Juan Manuel Kindelán. Redondo, a requerimientos del ministro de Industria, ha alegado la independencia de cada sindicato. El enfrentamiento entre UGT de minería y la Dirección General de Minas se ha puesto últimamente de manifiesto en la Empresa Nacional Adaro, sobre cuya transformación ambas partes mantienen posiciones encontradas.

MadridEl secretario general de UGT, Nicolás Redondo, se ha negado a intervenir en la polémica abierta entre la federación de minería de UGT y Juan Manuel Kindelán, director general de Minas, del Ministerio de Industria. Kindelán, según versiones de la central socialista, dirigió una carta al secretario general de UGT, pidiéndole que interviniera ante José Antonio Saavedra, responsable máximo de la citada federación, para que éste pusiera fin a las hostilidades.Redondo no respondió a las demandas del director general. Posteriormente, Carlos Solchaga, ministro de Industria, se dirigió a Nicolás Redondo con el mismo objetivo de Kindelán. El secretario general de UGT respondió al ministro explicando su imposibilidad de actuar, aduciendo la independencia de cada federación.

Los enfrentamientos entre la federación minera y el director general de Minas han sido constantes. Actualmente, Juan Manuel Kindelán tiene pendiente una querella criminal interpuesta por José Antonio Saavedra por el accidente de la mina Río, de Combustibles de Fabero, que costó la vida a ocho mineros.

Al mismo tiempo, José Antonio Saavedra había escrito un artículo en el boletín Los Mineros, órgano de la federación minera de UGT, bajo el título de ¿Quién manda en la minería de nuestro país?, en el que se criticaba con toda dureza la falta de iniciativas de la Dirección General de Minas. Saavedra explicaba las razones de la desidia de la dirección general por las relaciones familiares de su responsable. Y a este respecto, Saavedra recordaba que Kindelán formaba parte de la familia de "Leopoldo Calvo Sotelo, José María López de Letona y Carlos Bustelo, que en íntima relación con poderosos grupos económicos han ayudado a colocar a nuestra industria en la situación en la que se encuentra en estos momentos".

El último enfrentamiento se ha dado en torno a la Empresa Nacional Adaro. La federación minera de UGT, apoyando principios del comité de empresa, defiende la necesidad de mantener su actual estructura y de que se paralice el traslado de la sociedad. UGT cree que Adaro tiene campo para mantener las labores de investigación.

Debilitar la empresa

Según UGT, Industria tiene intención de potenciar el Instituto Geológico y Minero (IGME) en detrimento de Adaro. Al mismo tiempo que se busca el debilitamiento de la empresa nacional, se dejaría la investigación minera en nuestro país en manos de las multinacionales del sector implantadas en España. El Plan Operativo Anual (POA) de Adaro contempla la desaparición del laboratorio de mineralurgia, con 17 personas, único en nuestro país en su género, además del traslado de las instalaciones a Madrid desde el Cerro de los Ángeles, basándose en un ahorro presupuestario.UGT y el comité de empresa han presentado sendos informes demostrando que el ahorro económico es ficticio. La central socialista plantea una reestructuración de Adaro, con la participación de la empresas mineras del sector.