Un capitán, obligado a dimitir por los policías de su compañia
El capitán de Infantería Francisco Javier Álvarez, de 32 años, se vio obligado a presentar su renuncia a la jefatura de la 3ª Compañía de la Reserva General, como consecuencia del encierro que protagonizaron unos 300 policías nacionales en el propio acuartelamierito.Los encerrados acusaban al capitán Álvarez Díez de ser autor de vejaciones y coacciones "absolutamente intolerables" hacia los policías a su mando. En este sentido, el Sindicato Unificado de Policía (SUP) y el Sindicato Profesional de Policía Uniformada (S PPU) solicitaron la sustitución inmediata del capitán Álvarez Diez. El SUP denunciaba el incumplimiento del programa socialista en cuestiones de política policial y pidió que los mandos militares de la policía vuelvan al Ejército, además de que se refuerce el carácter exclusivamente civil de la policía.
La acción de protesta de los policías se inició el viernes por la tarde, y no finalizó hasta la noche de ayer, cuando el capitán presentó la renuncia requerido por sus superiores jerárquicos.
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