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Éxito de las ondas de choque en el tratamiento de cálculos renales

Más del 90% de los pacientes con 'piedras' en el riñón las elimina totalmente antes de tres meses

El 90% de los enfermos con cálculos renales que se han sometido al tratamiento por ondas de choque han eliminado totalmentente las piedras del riñón en un plazo inferior a tres meses. Este nuevo método, que ha sido aplicado ya a 250 pacientes en el Centro de Litiasis Renal que ha creado en Barcelona la Caja de Pensiones (La Caixa), permite pulverizar de manera no dolorosa los cálculos, que hasta ahora debían ser extraídos mediante intervenciones quirúrgicas.

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La experiencia positiva de dos pacientes

El nuevo tratamiento consiste en un bombardeo del riñón afectado, durante algo más de media hora, con ondas de choque muy breves, del orden de los nanosegundos (milmillonésimas de segundo), lo que origina cargas mecánicas que rompen las piedras, compuestos minerales formados en el riñón por un exceso de cristales en la orina. El paciente, instalado en una bañera de agua tibia, recibe de 700 a 1200 ondas, que percibe como leves chasquidos, sin sentir en momento alguno dolor de ningún tipo. El enfermo puede reintegrarse a su vida normal en un plazo muy breve, después de dos a cuatro días de hospitalización. Este plazo es de unos cuarenta días en el método habitual de intervención quirúrgica, que tiene consecuencias traumáticas y secuelas indirectas, al tener que cortar los músculos abdominales para acceder al riñón.La experiencia de los cuatro meses de funcionamiento ofrece conclusiones muy optimistas sobre el éxito del tratamiento, que al principio había sido cuestionado por algunos urólogos -al ser poco conocido en España- a pesar de estar homologado por los investigadores y las publicaciones especializadas de todo el mundo. Según el doctor Francisco Javier Ruiz, director médico del Centro de Litiasis Renal, "más del 90% de los pacientes tratados ha expulsado totalmente sus cálculos antes de tres meses, otro 9% ha tardado, algo más en hacerlo y sólo en el 1% de los casos se ha requerido una intervención quirúrgica adicional, que posiblemente pueda ser evitada en el futuro al perfeccionarse el sistema". Actualmente, 250 pacientes están en lista de espera para someterse a este tratamiento, que sólo se administra en otros cinco países en todo el mundo (República Federal de Alemania, EE UU, Gran Bretaña, Francia, Italia y Austria). En España se estudia su implantación en centros hospitalarios de Madrid, Valencia y Zaragoza.

La aparición de piedras en el riñón está aumentando) en los últimos 50 años, y un 4% de la población las padece en algún momento de su viaa. Cada año se operan en España unas 35.000 personas. Esta enfermedad aumenta en las sociedades desarrolladas por el incremento de proteínas en la alimentación, evolución genética, el estrés y el consumo de aguas duras, muy ricas en sales. Produce alteraciones del metabolismo, infecciones y defectos orgánicos.

Avance importante con algunas limitaciones

Según el doctor Ruiz, "al menos tres cuartas partes de todos los enfermos que hasta ahora se operan pueden seguir con éxito este tratamiento". Para él, "el método de las ondas de choque es el avance más importante de este siglo en la terapeútica del riñón, y en poco tiempo será mucho mejor y menos costoso al perfeccionarse el sistema". No existe ninguna contraindicación médica al tratamiento, ni límite de edad (han sido tratados pacientes desde 17 a 74 años) e incluso se ha aplicado a enfermos con arterioesclerosis o con infartos recientes. Se ha Regado a pulverizar piedras coraliformes de hasta ocho centímetros. Este sisteina no se puede utilizar si las piedras están situadas en el uréter terminal, por debajo de la cresta ilíaca (ya que los huesos de la cadera impedirían el paso de las ondas), o en el caso de que la dolencia esté originada por una malformación orgánica del riñón.El coste medio del tratamiento se eleva a unas 360.000 pesetas, incluyendo hospitalización y unas costosas pruebas previas radiológicas y de metabolismo. Según el administrador del centro, Jesús María Ramos, se trata de "un muy ajustado precio de coste", que fue calculado sobre la base de realizar unos 800 tratamientos al año, teniendo en cuenta que la instalación del sistema le supuso a La Caixa el desembolso de 309 millones de pestas, de los cuales 254 corresponden al precio de la maquinaria, de procedencia alemana. A finales del pasado mes de enero se ofreció a la Seguridad Social la posibilidad de firmar un concierto para atender a sus afiliados, petición que no ha sido aún contestada.

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