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La Caja Layetana presenta querella contra un agente de Bolsa por apropiación indebida

Andreu Missé

MISSÉ La Caja de Ahorros Layetana presentó el pasado jueves una querella criminal contra el agente de Cambio y Bolsa del colegio de Barcelona Alejo Buxeres Pons por el presunto delito de apropiación indebida. La cantidad reclamada por esta caja se aproxima a los 3.500 millones de pesetas. Fuentes de la entidad señalaron que la cifra de posibles pérdidas se situaría en torno a los 1.000 millones de pesetas, pero precisaron que, como medida preventiva, en la reclamación se incluían títulos pendientes de liquidación. La Caja de Ahorros de Sabadell acordará hoy la presentación de otra querella por idénticos motivos por una cuantía superior a los 1.300 millones de pesetas.

La interposición de estas acciones legales supone la ruptura del pacto de silencio que explícitamente habían acordado los agentes de la Bolsa de Barcelona y los directivos de las cajas afectadas por las operaciones anómalas descubiertas en el despacho de Buxeres, que podrían haber generado un descubierto superior a los 4.000 millones de pesetas. Fuentes autorizadas coinciden en señalar que el citado despacho era el centro de una creciente actividad arriesgadamente especulativa.La versión sobre el tipo de operaciones que se celebraban en el principal despacho bursátil de Barcelona, que ingresaba en concepto de comisiones unos 1.500 millones de pesetas anuales, difiere mucho según las informaciones procedan del colegio de agentes o de las cajas de ahorro.

Para Pere Antón Doria, director general de la Caja de Ahorros Layetana, todas las operaciones concertadas con el agente de Bolsa han sido perfectamente legales. "En nuestro caso", señaló, "no ha habido operaciones irregulares, ni dobles, ni nada ilegal. Lo que ha ocurrido simplemente es que Buxeres no compraba los títulos que le ordenábamos, aunque nos remitía pólizas, certificados oficiales y liquidaciones de operaciones que luego no aparecen. Ello hace sospechar la posible falsificación de documentos mercantiles y públicos". Doria ha manifestado su incomprensión por la actitud del colegio de agentes de Barcelona, que "a pesar de todos los ruegos y requerimientos efectuados en el último mes y medio, sigue sin facilitar la más mínima información".

Por otra parte, Jaime Ruiz Cabrero, síndico de la Bolsa de Barcelona, cuya junta decidió suspender en sus funciones a Alejo Buxeres el pasado 21 de enero, ofrece una versión distinta de la actuación de las cajas de ahorro. El síndico afirma que las cajas tienen la misma información general que el colegio y que si todavía no se han cuantificado todas las operaciones, ello es debido a que aún no se ha cerrado la contabilidad del despacho.

El síndico cree que Buxeres y algunas cajas han efectuado operaciones irregulares de las llamadas dobles (venta de títulos con el compromiso de comprarlos a un mayor precio en un breve plazo) prohibidas en la legislación española desde 1940. La posible actuación irregular de las cajas está siendo objeto de investigación por parte del Banco de España. Hasta el momento, el gobernador del banco emisor, Mariano Rubio, ha dado orden de que se abran expedientes a 11 entidades, entre las que se encuentra la propia confederación.

La Caja de Ahorros Layetana ha generado un cash flow de 1.500 millones de pesetas en 1984, lo que representa un incremento del 22% respecto al año anterior. De esta cantidad destinará 680 millones, junto a otros 400 del año anterior, a reserva especial para afrontar el percance. Los resultados brutos de la Caja de Sabadell fueron de 2.484 millones de pesetas, de los que se destinarán 1.283 para remediar el quebranto de sus negocios con Buxeres.

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