La muerte de un anciano no fue provocada por su yerno como afirmó la policía

Pedro Rico, de 84 años, murió de edema pulmonar agudo provocado por infarto de miocardio, según el resultado de la autopsia que le fue practicada, han informado dos de sus hijos. Esta versión desmiente la facilitada por la Jefatura Superior de Policía de Madrid. Este organismo informó el pasado 31 de enero (ver EL PAÍS de 1 de febrero) que Pedro Rico había fallecido al golpearse la nuca contra una mesa de cristal después de haber sido empujado por su yerno, Domingo Colás.Domingo Colás se encuentra en libertad sin cargos. Colás sostenía una fuerte discusión con su esposa en el domicilio conyugal y el anciano quiso apaciguar los ánimos de su hija y su yerno. En un momento dado sufrió el infarto y se desplomó al suelo. Su yerno dijo a los policías, compungido por el hecho y con sentimiento de culpa, "le he matado, le he matado", frase que fue interpretada por los agentes como una confesión.