Reagan y Mondale proclaman su triunfo, pero los resultados de las encuestas son demoledores para los demócratas

El presidente de Estados Unidos, Ronald Reagan, espera conseguir un segundo mandato tras la jornada de hoy. Reagan, de 73 años, esperará la victoria en su Rancho del Cielo, en Santa Bárbara, en el Estado de California. Walter Mondale, de 56 años, confía también en el triunfo y esperará los resultados en la residencia familiar de Saint Paul, en Minnesota, su Estado natal. Republicanos y demócratas desean, lógicamente, ganar, pero las encuestas de opinión son demoledoras para Mondale. Todos los sondeos apuntan hacia una abrumadora victoria de Reagan, con márgenes que varían entre un mínimo del 10% hasta el 26%.

"Triunfaremos en todos los Estados de la Unión", manifiestan, optimistas, los estrategas electorales de Reagan. Para ellos, será una barrida histórica para el veterano presidente, que, ya en 1980, ganó en 46 Estados de los 50 que integran la Unión, frente al por entonces titular de la Casa Blanca, el demócrata James Carter.La inesperada estancia de Reagan, durante su campaña electoral por varios Estados del Medio Oeste, en Minnesota -considerado como un feudo de Mondale- dejó claro que el candidato conservador va por la victoria total. En su última jornada de campaña, en el Estado de California, Reagan insistió en la necesidad de que los electores republicanos acudan a las urnas, sin dar por hecho un triunfo que parece casi seguro. El actual inquilino de la Casa Blanca desea promover al máximo el voto pro republicano Se trata tanto de garantizar su presidencia para otros cuatro años como de mantener la mayoría republicana en el Senado y ganar varios escaños en la Cámara.

"Mañana los expertos en sondeos de opinión republicanos se llevarán la sorpresa más grande de su vida", contraatacó ayer Mondale. En su última jornada de campaña, también en California, el candidato demócrata intentó dar moral a sus seguidores y partidarios, y se resistió, como buen político, a dar por perdido el voto antes de conocer los resultados. Pero, incluso entre las previsiones más optimistas, Mondale sólo aparece con probabilidades de victoria en el pequeño distrito de Columbia (unos 750.000 habitantes que viven en Washington, DC, capital federal del Estado). Mondale puede también conseguir victorias morales en su Estado natal, Minnesota; en Massachusetts, lugar de residencia del clan Kennedy y Estado con amplias capas de electorado demócrata, y en los Estados de Maryland, Michigan y Hawai. En los restantes, los sondeos locales y nacionales dan una diferencia considerable en favor del actual equipo en el poder, el presidente Ronald Reagan y su vicepresidente, George Bush.

La mayoría de los grandes diarios, a excepción de diarios de gran prestigio y tradición proliberal como The New York Times, The Washington Post, The Filadelfia Inquirer, se han manifestado editorialmente a favor de un segundo mandato Reagan-Bush. En este mismo sentido se han expresado los pequeños diarios locales. No obstante, algunos han aprovechado para realizar severas críticas a los cuatro primeros años de Administración Reagan. Y, sobre todo, han advertido al presidente que una victoria arrolladora en la jornada de hoy, martes, tanto en la Presidencia como en el Congreso, no debe suponer un cheque en blanco para el período de enero de 1985 a enero de 1989.