Detenidos los secuestradores de un familiar de la 'banquera del pueblo'

La policía judicial portuguesa anunció ayer la detención de tres presuntos secuestradores del hijastro de doña Branca dos Santos, conocida como la banquera del pueblo, que fue liberado dos días después. Ernesto Cordeiro y su compañera, Gisela Abreu, fueron secuestrados el pasado 27 de septiembre cerca de su residencia en Oeiras, en los alrededores de Lisboa, por desconocidos que les obligaron a entrar en dos automóviles.

Al día siguiente, la mujer fue liberada y dijo que los secuestradores matarían a su compañero si doña Branca no les entregaba una suma de 30 millones de escudos (unos 200.000 dólares) como rescate, lo que la policía impidió al cercar la residencia donde se encontraba la misteriosa dama de 74 años y vigilar sus entradas y salidas.

No obstante, Cordeiro apareció por sus propios medios en la sede de la policía judicial, aparentemente sin que los secuestradores hubiesen recibido la suma, lo que provocó sospechas sobre la autenticidad de la acción.

Según reveló a la policía uno de los detenidos que se entregó y confesó el crimen, el secuestro fue una forma de intentar recuperar los intereses que no habían sido pagados por la organización de la banquera, de la que eran clientes, que se encuentran suspendidos desde el pasado julio.

Pago de intereses

Doña Branca ofrece intereses de un 120% al año a los que le confiaban sus ahorros, y sus negocios misteriosos llevaron a que las autoridades determinaran las investigaciones correspondientes. Mientras tanto, la policía judicial está investigando también la denuncia de desaparición de una suma de 800 millones de escudos (algo más de 800 millones de pesetas) de una de las.residencias de la banquera, de acuerdo con su propia denuncia durante un interrogatorio a que fue sometida la semana pasada.

Tras el cierre de su oficina central en Lisboa, que parece provocado por una situación de quiebra de la organización, doña Branca anunció que reanudará el pago de los intereses hoy, lunes, responsabilizando al Gobierno si ello no ocurre. Hace días, suspensió el pago de intereses a sus depositantes, argumentando que las sospechas que recaen sobre su organización ha provocado una fuerte fuga de depósitos, con la consiguiente merma de liquidez.

En ese caso, la banquera del pueblo ha anunciado que exhortará a sus clientes a que se concentren el día siguiente ante la sede del Parlamento portugués para reclamar la necesaria autorización para la apertura de un banco privado de su organización.