Miembros del Gobierno proponen sustituir el Consejo Supremo de Justicia Militar por un tribunal con participación de civiles

Miembros del Gobierno, entre ellos el titular de Trabajo, Joaquín Almunia, son partidarios de sustituir el Consejo Supremo de Justicia Militar, el más alto tribunal militar existente en la actualidad, por un tribunal mixto, compuesto por civiles y militares, que pasaría a formar una sala especial dentro del Tribunal Supremo. El subsecretario de Defensa, Gustavo Suárez Pertierra, declaró ayer a varios periodistas que esa es una de las tesis con las que trabaja su departamento, ante la próxima elaboración del proyecto de ley sobre organización de los tribunales militares.

Este proyecto de ley, según Suárez Pertierra, será estudiado por el Consejo de Ministros el año próximo, y supondrá un eslabón más en el proceso de reforma de la justicia militar, iniciado el mes pasado con la remisión a las Cortes del proyecto de ley orgánica del Código Penal Militar. La propia existencia de tina justicia militar en tiempos de paz fue calificada por Suárez Pertierra como "conveniente, pero quizás no necesaria" para la sociedad española actual.El subsecretario comentó en otro momento que "el Ministerio de Defensa aún no está consolidado, porque el proceso iniciado es largo". Se refirió a la reforma de la enseñanza militar, aspecto del que en el departamento se habla desde el año pasado pero todavía no se han concretado las bases mínimas de realización, y dijo que existe una clara voluntad de mejorar técnicamente la enseñanza militar, de modernizarla, pero sin implicaciones políticas dudosas. Suárez Pertierra anunció que los mozos correspondientes al próximo reemplazo, que serán convocados el día 9 de octubre, estarán ya sujetos a la nueva ley del Servicio Militar, aprobada hace unos meses.

Finalmente, el subsecretario manifestó que las retribuciones militares se incrementarán en un 6,5% para el año próximo, si bien se mostró escéptico respecto a la posibilidad de que este incremento pueda suponer una equiparación salarial entre los funcionarios civiles y los militares.