Extraña desaparición de un camarero del barco 'Ciudad de La Laguna' en alta mar

La desaparición en extrañas circunstancias de un tripulante del barco de la compañía Trasmediterránea Ciudad de La Laguna, ocurrida el pasado viernes cuando la embarcación realizaba un crucero turístico entre las islas de La Gomera y Tenerife, continuaba siendo todo un misterio ayer. Ninguno de sus compañeros de trabajo, que lo han buscado hasta el último rincón del transbordador, ni sus familiares, que desde la isla de La Palma viven horas de desconsuelo ante la falta de noticias, logran explicarse qué pudo sucederle a Enrique Valdés González, camarero, de 50 años de edad.

El desaparecido acababa de restablecerse de un accidente en el que se había roto una costilla, lo que le valió 20 días de baja.

Padre de dos hijos, había confesado, antes de embarcarse el pasado miércoles para iniciar cuatro meses de travesía en el Ciudad de la Laguna, su deseo de jubilarse en cinco años, tras 28 años de trabajo en la mar.

Sus compañeros le describen como serio y trabajador. Afirman que en su último viaje se mostró triste y desapasionado, sin ganas siquiera de jugar al dominó, su mayor afición. Tardó en acostarse y pidió un cigarrillo más fuerte que de costumbre. Marcos León Santana le vio por última vez durmiendo en su camarote, a las 4.45 del viernes. Dos horas después, al no reincorporarse al trabajo, se advirtió que había desaparecido.