Las lluvias aplacan la violenta polémica entre vecinos y desnudistas en Cangas

Tras el frustrado intento de la autoridad municipal, las lluvias han desalojado pacífica y espontáneamente el campamento nudista en la playa de Barra, en la península del Morrazo, en Pontevedra. Los vecinos del lugar próximo de Viñó han emprendido gestiones a nivel gubernativo para que se revoque la legalización del desnudismo en esta playa, que es ya todo un símbolo para los naturistas gallegos. Por su parte, el cura párroco de Hío niega toda participación en el movimiento de rechazo y desmiente su presencia entre el grupo de vecinos que acudió al intento de desalojo hace escasas semanas.

Andrés Carril, párroco de Hío, asegura que no tiene intención de "encabezar una cruzada contra el desnudismo" y que no ha tenido "arte ni parte en el conflicto de los vecinos con los desnudistas". "Mucho menos garrote en mano; no es mi estilo la violencia". "No obstante" añade, "la gente de allí tiene derecho a estar tranquila y es muy sensible a todo lo que se le impone".Los vecinos de Viñó confirman que el párroco no se encontraba entre el grupo que acudió al desalojo y afirman que Andrés Carril está al margen del conflicto. Todo el equívoco surgió, explican, porque los campistas, en los momentos de tensión, confundieron a uno de los vecinos con el párroco, coreando incluso "que hable el cura, que hable el cura", y así fue recogido por los informadores. "Cuando me di cuenta de que se dirigían a mi marido", dice una vecina, "me quedé cortada y marché". El párroco se fue de vacaciones por esa fecha y el equívoco no se aclaró.

Ninguno de los vecinos de Viñó quiere identificarse, "porque éste es un asunto de todos". Algunos bajaron a la playa con palos, "pero sólo para apoyarse en la arena". "Aunque si esto sigue así tendremos que tomar nuestras medidas".

El cura Andrés Carril, que pasa unos días de descanso en Cequeril (Pontevedra), está dolido por la situación creada. Él frecuenta la playa de Nerga, separada de la desnudista, y allí estuvo el domingo 12 por última vez. "Lo siento, no hago juicio de valor", insiste cuan do se le pregunta su opinión sobre la polémica, aunque añade que mis estudios de pedagogía y psicología me llevaron a comprender al hombre y al ser humano".